El presidente estadounidense, Donald Trump, amenaza hoy con aranceles del 200% a las bebidas alcohólicas europeas como el vino y el champán. Un contraataque que lanza después de que la Unión Europea anunciase su intención de gravar productos americanos. Para nuestro país, EE.UU es el segundo mercado al que exportamos por detrás del alemán. Y la preocupación entre las empresas sigue creciendo ante las posibles pérdidas de esta medida.
Entre los posibles productos afectados estaría el vino, como el de origen La Rioja y Ribera del Duero. Trump menciona el champán pero aquí tenemos cava, su primer mercado, y el txacoli. Ahora, cuatro productos españoles están expectantes ante la amenaza del presidente americano.
España es el cuarto país proveedor de bebida alcohólica a Estados Unidos. En un año, ganamos casi 400 millones de euros. Ante la amenaza, hay quien ya toma medidas. En una bodega de Txacoli hacen pedidos por adelantado. “Los pedidos que ya se han enviado no sufrirían aranceles”, explica Paula Ortolaza, de la bodega 'Txacoli Gañeta'. Y en otra de Vizcaya, ven imposible vender su vino al país.
Según informa Michelle Herrera, el director general de La Rioja, José Luis Lafuente, muestra la preocupación de esta medida que podría triplicar el precio de la botella. Esto podría suponer la salida del mercado del producto. Lafuente espera que las negociaciones se lleven a cabo con sentido común y que esto no afecte al sector. Estados Unidos es el tercer país de las exportaciones de esta denominación.
En Txacoli, la alarma y la incertidumbre está latente. Las exportaciones a EE.UU tuvieron un valor de 35 millones de euros el año pasado. El país se encuentra entre los principales clientes: de las 100.000 botellas que hacen, el 25% se exporta de forma mayoritaria a Estados Unidos, según informa Maialen Larrinaga.
En Valladolid, el sector del vino tiene al país como el segundo mayor destino internacional. Según informa Carla Infiesta, los bodegueros tomarían medidas para que afectase lo menos posible y así no perder la confianza de los clientes. Pese al ambiente de incertidumbre, aseguran que no van a dejarse llevar por el posible golpe del vino.
En Sant Sadurní d'Anoia, el mercado estadounidense es muy importante y no se puede abandonar. El país supone el 10% del mercado del cava y las restricción rompería los vínculos comerciales cerrados con el país. Ahora, buscan priorizar la calidad y abrir mercado en otros países.
“Nos deja fuera del mercado. Lógicamente, el consumidor no lo va a comprar”, subraya Itziar Insausti, de la bodega 'Noniene Garrandona Txacolina'. En Peñafiel (Valladolid), se plantean directamente reorientar el producto y no ser tan dependientes de los estadounidenses. “En vez de poner todos nuestros esfuerzos a EE.UU, dirigirnos a otro país”, indica Luisa de Paz, directora de las bodegas 'Protos'.
En una bodega más pequeña de Huelva, que acaba de aterrizar en EE.UU, perdería 30.000 euros de Brandy si Trump cumpliese su amenaza. “Nosotros vamos directamente a través de un importador. Para nosotros sería directamente paralizar”, lamenta Manuel Astasio, bodegas 'Infante'. El miedo se traslada desde el Despacho Oval hasta Barcelona. Unas amenazas demasiado caras que, de cumplirse, pagaríamos con nuestro bolsillo.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.