El precio de la luz se dispara y poner la calefacción se convierte casi en un bien de lujo. Con las temperaturas gélidas de esta semana, en lugares como Ávila no hay opción y tienen que ponérselo pese al riesgo de una subida del precio en la factura. Según informa Verónica Melendre y Ana Martín, las heladas en las zonas de interior han dejado los termómetros en seis grados bajo cero.

Las peores temperaturas se han registrado en el pueblo segoviano de Cuéllar. Esta zona lidera el ranking de puntos más fríos con 12 grados bajo cero. Son días de puro invierno que están obligando a muchos a ampliar las horas de calefacción e incluso de encenderla desde primera hora de la mañana.

Poner la calefacción es un acto que todos temen por el precio de la luz. Jesica es incapaz de quitarse de la cabeza la factura, aunque con dos hijos no es fácil mantener el calor sin que se dispare la factura. “Tienes que tener la calefacción muy cargada para poder quitarla y que ellos no pasen frío”, reconoce.

Las soluciones para calentarse son limitadas. “No sé qué me compensa: comer o calentarme”, reconoce una mujer. La OCU sostiene que la temperatura entre 19 y 21 grados es suficiente para mantener el confort térmico durante el día. En la noche, sobra con poner la calefacción entre 15 y 17 grados. Todo para no pasar frío en estos gélidos días.

En plena ola de frío, el precio de la luz toca su máximo y llegará hasta los 140,94 euros por megavatio hora. Esto es un 42% más que la semana pasada. El pico máximo lo ha alcanzado entre las 08:00 y las 09:00 horas de la mañana, con 225 euros por megavatio hora. Tendríamos que remontarnos a 2022, en plena crisis por la invasión de Ucrania, para encontrar un precio tan alto en el mercado.

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