Los jugadores del Maribáñez Fútbol Club se ponen en manos de Cristóbal Soria y quieren con ello poder crecer y subir de categoría. Por ello, el histórico delegado de campo del Sevilla FC llega a este pequeño pueblo junto a un equipo de especialistas para ponerse manos a la obra, entre ellos está Alicia, nutricionista y preparadora física.
Los jugadores se quedan perplejos al ver a Alicia mientras se toman una cerveza y ella llega pisando fuerte: "Hay jugadores aquí que tienen unos 20 kilos de más y eso es intolerable en un equipo que quiere ganar". "Poner en forma a esta pandilla que quiere llamarse equipo es el mayor reto de mi vida", reacciona ella ante su primer contacto con los jugadores.
Cristóbal Soria presenta al equipo a Alicia y les dice unas rotundas palabras: "Hoy es el primer día de la nueva era del Maribáñez, quiero aquí gente comprometida, hemos venido aquí para ganar partidos y para ascender de categoría". Y tras esto, Alicia se pone manos a la obra, primero carrera continua, tras esto flexiones, sentadillas, entre otros muchos ejercicios físicos. Pero no todos comienzan con este entrenamiento, Chinchi, el delantero de 107 kilos y que tan solo lleva dos goles en toda la temproada llega tarde por tener que trabajar y Alicia se pone manos a la obra con él: "Me comprometo en que en seis meses pierdas unos 15 kilos, hoy te vas a poner a correr por haber llegado tarde".
Algunos de los jugadores creen que la llegada de Alicia no le va a gustar nada a sus parejas y esto lo confirman ellas mismas. En medio de una conversación llegan a la conclusión de que algo está pasando porque los jugadores están yendo de punta en blanco a los entrenamientos. Emma llega a la conclusión de que puede ser por lo que se ha enterado por ahí, la llegada de Alicia: "A mí me da celos".
Y cuando llega Jesús a casa tiene una sorpresa preparada una cena de lo más sana: "Pizza igual a Emma, ensalada igual a Alicia". Y cuando él está preparado con su pijama de picachu para irse a la cama ella le manda a dormir con su madre. Pero no es el único que tiene consecuencias, Bea manda a 'el largo' a dormir en el sofá y todas comparten la idea de que esta nueva llegada no es de su agrado.