Unas vacaciones con tu perro en la montaña significan relajación, aire limpio, bienestar. Es decir, el entorno natural en el que las personas confían para encontrar la paz.
Por ello, compartir unas vacaciones con tu perro puede ser una buena idea, pero hay algunas cosas que debes saber para proteger la salud de tu perro y brindarle la experiencia más positiva posible. Así que si están planeando unas vacaciones con tu perro en la montaña, este artículo es para ti.
Te daremos consejos para a tener cuenta para pasar unas vacaciones con tu perro en la montaña, que sea ¡GUAU!
Nadie conoce mejor a nuestro perro que nosotros, pero no está de más consultar a tu veterinario antes de realizar actividad física con él, en función de la edad, estado y las características físicas de tu perro. No todos los perros tienen las mismas características y habilidades. Así como un Galgo puede correr a gran velocidad y largas distancias, un Chihuahua no lo podrá hacer.
A la hora de planificar un viaje a la montaña, no puedes olvidarte de pensar en tu perro y a lo que está acostumbrado. Debemos recordar que los paseos largos solo deben hacerse cuando nuestro perro esté acostumbrado.
Algunas de las razas que se adaptan mejor a las montañas son: Pastor Americano Mini, Landseer y American Staffordshire Terrier.
Es importante que tu perro esté entrenado para largos senderos o largos paseos por la montaña. Necesitamos conocer los límites de nuestro perro y no planear cosas que puedan ponerlo en riesgo.
La cantidad de cosas que necesitas para unos días en la montaña es increíble, y lo puedes comprobar cuando prepares tu mochila y la de tu fiel compañero. La deshidratación puede convertirse en un gran problema para tu mascota, especialmente durante el ejercicio. Si vas a la montaña con tu perro, asegúrate de que esté siempre hidratado y dale agua cada 30 minutos.
En primer lugar, se recomienda no ir a la montaña en pleno verano, sino elegir una época del año más fresca, como el otoño. No camines durante las horas más calurosas del día, ya que el perro puede sufrir un golpe de calor. Si esto sucede, se recomienda refrescarlo lo antes posible.
Suelos empedrados, tramos de asfalto, zonas rocosas... pueden dañar y agrietar las almohadillas de tu perro. Este problema se soluciona utilizando botas especiales para perros.
A veces, los perros no están acostumbrados a tales exigencias físicas y pueden mostrar algunos síntomas que indican que algo no está bien. Por ejemplo, babeo excesivo, dificultad para respirar, sensación de debilidad o temblores musculares.
Sobre todo, si nuestra ruta transcurre por zonas montañosas, no está de más llevar ropa de abrigo por si hay un cambio brusco de temperatura, y ropa impermeable por si llueve.
Se recomienda comenzar con caminatas de aproximadamente una hora y luego verificar su nivel de energía. Si el perro todavía está activo, está listo para aumentar el tiempo en la próxima caminata de entrenamiento.
De esta manera mejorará su estado físico antes de su gran aventura y asegurarse de estar realmente preparado.
Las caminatas por la montaña ofrecen mucha diversión y son pura satisfacción para tu perro. No hay excusas para dejarlo en casa, puedes compartir el hermoso paisaje de montaña con él y salir juntos y desconectarse. Él te lo agradecerá.
Fte: Smylepets