Granjera, rociera y folklórica
Se llama como la más grande, aunque su madre asegura que no se dio cuenta de que la había llamado así hasta que el pediatra dijo el nombre completo en la consulta. “Me han llegado a echar de clase porque se pensaban que les estaba tomando el pelo”.
Fue su abuelo quién empezó a criar caballos rocieros cuando ella era pequeña y desde entonces toda la familia vive para y por este tipo de ganado. Para Rocío el campo es “como el café de la mañana, me hace falta venir todos los días”. Cada mañana va a su granja a sacar a los caballos, cepillarlos, limpiar sus cuadras…
Ella tiene claro lo que busca, quiere un hombre para su casa y un padre para sus hijos. Nunca se ha casado ni tiene descendencia pero está deseando formar una familia. Necesita encontrar a alguien que la quiera, la cuide y que disfrute tanto como ella del campo y de los animales. Sueña con un hombre que quiera acompañarla a “hacer juntos el camino del Rocío y de la vida”.
Le gustan más los chicos rubios, aunque para ella el físico no es lo más importante. El requisito fundamental es que no intenten engañarla, que sean hombres de palabra. Rocío no perdona una traición. Ha tenido tres relaciones sentimentales, de 2, 4 y 8 años respectivamente, y todas se han terminado por la misma razón, siempre acaban decepcionándola. Rocío siente que da mucho más de lo que recibe y está dispuesta a que eso cambie. Esa es la razón de que haya acudido a Granjero busca esposa, quiere que su próxima pareja sea por fin, la que le robe el corazón para siempre.
Granjera, rociera y folklórica
Se llama como la más grande, aunque su madre asegura que no se dio cuenta de que la había llamado así hasta que el pediatra dijo el nombre completo en la consulta. “Me han llegado a echar de clase porque se pensaban que les estaba tomando el pelo”.
Fue su abuelo quién empezó a criar caballos rocieros cuando ella era pequeña y desde entonces toda la familia vive para y por este tipo de ganado. Para Rocío el campo es “como el café de la mañana, me hace falta venir todos los días”. Cada mañana va a su granja a sacar a los caballos, cepillarlos, limpiar sus cuadras…
Ella tiene claro lo que busca, quiere un hombre para su casa y un padre para sus hijos. Nunca se ha casado ni tiene descendencia pero está deseando formar una familia. Necesita encontrar a alguien que la quiera, la cuide y que disfrute tanto como ella del campo y de los animales. Sueña con un hombre que quiera acompañarla a “hacer juntos el camino del Rocío y de la vida”.
Le gustan más los chicos rubios, aunque para ella el físico no es lo más importante. El requisito fundamental es que no intenten engañarla, que sean hombres de palabra. Rocío no perdona una traición. Ha tenido tres relaciones sentimentales, de 2, 4 y 8 años respectivamente, y todas se han terminado por la misma razón, siempre acaban decepcionándola. Rocío siente que da mucho más de lo que recibe y está dispuesta a que eso cambie. Esa es la razón de que haya acudido a Granjero busca esposa, quiere que su próxima pareja sea por fin, la que le robe el corazón para siempre.
Granjera, rociera y folklórica
Se llama como la más grande, aunque su madre asegura que no se dio cuenta de que la había llamado así hasta que el pediatra dijo el nombre completo en la consulta. “Me han llegado a echar de clase porque se pensaban que les estaba tomando el pelo”.
Fue su abuelo quién empezó a criar caballos rocieros cuando ella era pequeña y desde entonces toda la familia vive para y por este tipo de ganado. Para Rocío el campo es “como el café de la mañana, me hace falta venir todos los días”. Cada mañana va a su granja a sacar a los caballos, cepillarlos, limpiar sus cuadras…
Ella tiene claro lo que busca, quiere un hombre para su casa y un padre para sus hijos. Nunca se ha casado ni tiene descendencia pero está deseando formar una familia. Necesita encontrar a alguien que la quiera, la cuide y que disfrute tanto como ella del campo y de los animales. Sueña con un hombre que quiera acompañarla a “hacer juntos el camino del Rocío y de la vida”.
Le gustan más los chicos rubios, aunque para ella el físico no es lo más importante. El requisito fundamental es que no intenten engañarla, que sean hombres de palabra. Rocío no perdona una traición. Ha tenido tres relaciones sentimentales, de 2, 4 y 8 años respectivamente, y todas se han terminado por la misma razón, siempre acaban decepcionándola. Rocío siente que da mucho más de lo que recibe y está dispuesta a que eso cambie. Esa es la razón de que haya acudido a Granjero busca esposa, quiere que su próxima pareja sea por fin, la que le robe el corazón para siempre.
Granjera, rociera y folklórica
Se llama como la más grande, aunque su madre asegura que no se dio cuenta de que la había llamado así hasta que el pediatra dijo el nombre completo en la consulta. “Me han llegado a echar de clase porque se pensaban que les estaba tomando el pelo”.
Fue su abuelo quién empezó a criar caballos rocieros cuando ella era pequeña y desde entonces toda la familia vive para y por este tipo de ganado. Para Rocío el campo es “como el café de la mañana, me hace falta venir todos los días”. Cada mañana va a su granja a sacar a los caballos, cepillarlos, limpiar sus cuadras…
Ella tiene claro lo que busca, quiere un hombre para su casa y un padre para sus hijos. Nunca se ha casado ni tiene descendencia pero está deseando formar una familia. Necesita encontrar a alguien que la quiera, la cuide y que disfrute tanto como ella del campo y de los animales. Sueña con un hombre que quiera acompañarla a “hacer juntos el camino del Rocío y de la vida”.
Le gustan más los chicos rubios, aunque para ella el físico no es lo más importante. El requisito fundamental es que no intenten engañarla, que sean hombres de palabra. Rocío no perdona una traición. Ha tenido tres relaciones sentimentales, de 2, 4 y 8 años respectivamente, y todas se han terminado por la misma razón, siempre acaban decepcionándola. Rocío siente que da mucho más de lo que recibe y está dispuesta a que eso cambie. Esa es la razón de que haya acudido a Granjero busca esposa, quiere que su próxima pareja sea por fin, la que le robe el corazón para siempre.
Granjera, rociera y folklórica
Se llama como la más grande, aunque su madre asegura que no se dio cuenta de que la había llamado así hasta que el pediatra dijo el nombre completo en la consulta. “Me han llegado a echar de clase porque se pensaban que les estaba tomando el pelo”.
Fue su abuelo quién empezó a criar caballos rocieros cuando ella era pequeña y desde entonces toda la familia vive para y por este tipo de ganado. Para Rocío el campo es “como el café de la mañana, me hace falta venir todos los días”. Cada mañana va a su granja a sacar a los caballos, cepillarlos, limpiar sus cuadras…
Ella tiene claro lo que busca, quiere un hombre para su casa y un padre para sus hijos. Nunca se ha casado ni tiene descendencia pero está deseando formar una familia. Necesita encontrar a alguien que la quiera, la cuide y que disfrute tanto como ella del campo y de los animales. Sueña con un hombre que quiera acompañarla a “hacer juntos el camino del Rocío y de la vida”.
Le gustan más los chicos rubios, aunque para ella el físico no es lo más importante. El requisito fundamental es que no intenten engañarla, que sean hombres de palabra. Rocío no perdona una traición. Ha tenido tres relaciones sentimentales, de 2, 4 y 8 años respectivamente, y todas se han terminado por la misma razón, siempre acaban decepcionándola. Rocío siente que da mucho más de lo que recibe y está dispuesta a que eso cambie. Esa es la razón de que haya acudido a Granjero busca esposa, quiere que su próxima pareja sea por fin, la que le robe el corazón para siempre.
Granjera, rociera y folklórica
Se llama como la más grande, aunque su madre asegura que no se dio cuenta de que la había llamado así hasta que el pediatra dijo el nombre completo en la consulta. “Me han llegado a echar de clase porque se pensaban que les estaba tomando el pelo”.
Fue su abuelo quién empezó a criar caballos rocieros cuando ella era pequeña y desde entonces toda la familia vive para y por este tipo de ganado. Para Rocío el campo es “como el café de la mañana, me hace falta venir todos los días”. Cada mañana va a su granja a sacar a los caballos, cepillarlos, limpiar sus cuadras…
Ella tiene claro lo que busca, quiere un hombre para su casa y un padre para sus hijos. Nunca se ha casado ni tiene descendencia pero está deseando formar una familia. Necesita encontrar a alguien que la quiera, la cuide y que disfrute tanto como ella del campo y de los animales. Sueña con un hombre que quiera acompañarla a “hacer juntos el camino del Rocío y de la vida”.
Le gustan más los chicos rubios, aunque para ella el físico no es lo más importante. El requisito fundamental es que no intenten engañarla, que sean hombres de palabra. Rocío no perdona una traición. Ha tenido tres relaciones sentimentales, de 2, 4 y 8 años respectivamente, y todas se han terminado por la misma razón, siempre acaban decepcionándola. Rocío siente que da mucho más de lo que recibe y está dispuesta a que eso cambie. Esa es la razón de que haya acudido a Granjero busca esposa, quiere que su próxima pareja sea por fin, la que le robe el corazón para siempre.
Granjera, rociera y folklórica
Se llama como la más grande, aunque su madre asegura que no se dio cuenta de que la había llamado así hasta que el pediatra dijo el nombre completo en la consulta. “Me han llegado a echar de clase porque se pensaban que les estaba tomando el pelo”.
Fue su abuelo quién empezó a criar caballos rocieros cuando ella era pequeña y desde entonces toda la familia vive para y por este tipo de ganado. Para Rocío el campo es “como el café de la mañana, me hace falta venir todos los días”. Cada mañana va a su granja a sacar a los caballos, cepillarlos, limpiar sus cuadras…
Ella tiene claro lo que busca, quiere un hombre para su casa y un padre para sus hijos. Nunca se ha casado ni tiene descendencia pero está deseando formar una familia. Necesita encontrar a alguien que la quiera, la cuide y que disfrute tanto como ella del campo y de los animales. Sueña con un hombre que quiera acompañarla a “hacer juntos el camino del Rocío y de la vida”.
Le gustan más los chicos rubios, aunque para ella el físico no es lo más importante. El requisito fundamental es que no intenten engañarla, que sean hombres de palabra. Rocío no perdona una traición. Ha tenido tres relaciones sentimentales, de 2, 4 y 8 años respectivamente, y todas se han terminado por la misma razón, siempre acaban decepcionándola. Rocío siente que da mucho más de lo que recibe y está dispuesta a que eso cambie. Esa es la razón de que haya acudido a Granjero busca esposa, quiere que su próxima pareja sea por fin, la que le robe el corazón para siempre.
Granjera, rociera y folklórica
Se llama como la más grande, aunque su madre asegura que no se dio cuenta de que la había llamado así hasta que el pediatra dijo el nombre completo en la consulta. “Me han llegado a echar de clase porque se pensaban que les estaba tomando el pelo”.
Fue su abuelo quién empezó a criar caballos rocieros cuando ella era pequeña y desde entonces toda la familia vive para y por este tipo de ganado. Para Rocío el campo es “como el café de la mañana, me hace falta venir todos los días”. Cada mañana va a su granja a sacar a los caballos, cepillarlos, limpiar sus cuadras…
Ella tiene claro lo que busca, quiere un hombre para su casa y un padre para sus hijos. Nunca se ha casado ni tiene descendencia pero está deseando formar una familia. Necesita encontrar a alguien que la quiera, la cuide y que disfrute tanto como ella del campo y de los animales. Sueña con un hombre que quiera acompañarla a “hacer juntos el camino del Rocío y de la vida”.
Le gustan más los chicos rubios, aunque para ella el físico no es lo más importante. El requisito fundamental es que no intenten engañarla, que sean hombres de palabra. Rocío no perdona una traición. Ha tenido tres relaciones sentimentales, de 2, 4 y 8 años respectivamente, y todas se han terminado por la misma razón, siempre acaban decepcionándola. Rocío siente que da mucho más de lo que recibe y está dispuesta a que eso cambie. Esa es la razón de que haya acudido a Granjero busca esposa, quiere que su próxima pareja sea por fin, la que le robe el corazón para siempre.
Granjera, rociera y folklórica
Se llama como la más grande, aunque su madre asegura que no se dio cuenta de que la había llamado así hasta que el pediatra dijo el nombre completo en la consulta. “Me han llegado a echar de clase porque se pensaban que les estaba tomando el pelo”.
Fue su abuelo quién empezó a criar caballos rocieros cuando ella era pequeña y desde entonces toda la familia vive para y por este tipo de ganado. Para Rocío el campo es “como el café de la mañana, me hace falta venir todos los días”. Cada mañana va a su granja a sacar a los caballos, cepillarlos, limpiar sus cuadras…
Ella tiene claro lo que busca, quiere un hombre para su casa y un padre para sus hijos. Nunca se ha casado ni tiene descendencia pero está deseando formar una familia. Necesita encontrar a alguien que la quiera, la cuide y que disfrute tanto como ella del campo y de los animales. Sueña con un hombre que quiera acompañarla a “hacer juntos el camino del Rocío y de la vida”.
Le gustan más los chicos rubios, aunque para ella el físico no es lo más importante. El requisito fundamental es que no intenten engañarla, que sean hombres de palabra. Rocío no perdona una traición. Ha tenido tres relaciones sentimentales, de 2, 4 y 8 años respectivamente, y todas se han terminado por la misma razón, siempre acaban decepcionándola. Rocío siente que da mucho más de lo que recibe y está dispuesta a que eso cambie. Esa es la razón de que haya acudido a Granjero busca esposa, quiere que su próxima pareja sea por fin, la que le robe el corazón para siempre.
Granjera, rociera y folklórica
Se llama como la más grande, aunque su madre asegura que no se dio cuenta de que la había llamado así hasta que el pediatra dijo el nombre completo en la consulta. “Me han llegado a echar de clase porque se pensaban que les estaba tomando el pelo”.
Fue su abuelo quién empezó a criar caballos rocieros cuando ella era pequeña y desde entonces toda la familia vive para y por este tipo de ganado. Para Rocío el campo es “como el café de la mañana, me hace falta venir todos los días”. Cada mañana va a su granja a sacar a los caballos, cepillarlos, limpiar sus cuadras…
Ella tiene claro lo que busca, quiere un hombre para su casa y un padre para sus hijos. Nunca se ha casado ni tiene descendencia pero está deseando formar una familia. Necesita encontrar a alguien que la quiera, la cuide y que disfrute tanto como ella del campo y de los animales. Sueña con un hombre que quiera acompañarla a “hacer juntos el camino del Rocío y de la vida”.
Le gustan más los chicos rubios, aunque para ella el físico no es lo más importante. El requisito fundamental es que no intenten engañarla, que sean hombres de palabra. Rocío no perdona una traición. Ha tenido tres relaciones sentimentales, de 2, 4 y 8 años respectivamente, y todas se han terminado por la misma razón, siempre acaban decepcionándola. Rocío siente que da mucho más de lo que recibe y está dispuesta a que eso cambie. Esa es la razón de que haya acudido a Granjero busca esposa, quiere que su próxima pareja sea por fin, la que le robe el corazón para siempre.