Pedro es un amante del baile y del boxeo, y ha flipado cuando ha visto que su cita era una joven caracterizadora del Ballet Nacional que además, trabajaba de gogó. Cuando Oti ha cruzado la puerta de ‘First Dates’, el joven del pelo amarillo ha sentido un flechazo que ha tardado muy poquito en tocar el corazón de su cita.
Desde el minuto cero, Oti y Pedro se han gustado físicamente y han ido descubriendo que tenían unos gustos y unas aficiones muy similares. Pero quizás, el momento clave de la cita en el que ha saltado la chispa entre ellos ha sido cuando ella le ha confesado que buscaba a un chico que la esperara a que saliera de trabajar en la discoteca para seguir bailando con ella hasta el mediodía del día siguiente.
“Bailando reggaetón”, le ha contestado Pedro, feliz de saber que a su cita le encanta bailar. Y es que si algo tiene claro Oti es que “Este culo es para perrear no para llorar”. Su cita no podía estar funcionando mejor cuando han comenzado a hablar de sexo. Oti ha comenzado el juego asegurando que no podía confesar cuál era el lugar más raro donde lo había hecho porque era algo “ilegal” y se ha mostrado reacia a practicar sexo frente al mar “La arena no va a entrar en mis partes íntimas, lo siento”.
Pero aunque les fuera a costar un poquito ponerse de acuerdo en el dónde, parece que no les iba a costar entenderse en el cómo “Me gusta dominar, ser quién manda… Soy otra persona en la cama”, aseguraba Pedro frente a un “A mí me agarras del cuello y se me va la olla”, de Oti.
Tras la cena, los jóvenes han comenzado a bailar en el reservado y Pedro ha tardado dos minutos en lanzarse a besar a su cita: “No aguantaba más, desde los primeros diez minutos lo quería hacer”. No saben si será un amor para toda la vida, pero sí que comenzará bailando sin parar, ambos quieren repetir cita, baile y lo que surja.