Andrea es una persona bastante abierta que asegura que su tía siempre le decía que iba a trabajar en una comuna hippie. Según le ha contado a Carlos Sobera nada más llegar a ‘First Dates’, trabaja en el departamento de Instalaciones Deportivas del Ayuntamiento de Zaragoza. Es una persona muy natural y divertida “me gusta pasármelo bien”. Su tiempo libre lo dedica a sus animales. Tiene un perro, un gato y una gallina, antes tenía dos gallinas y un gallo, pero “un gallo transexual”.
Carlos Sobera no ha podido evitar exclamar un “¿Perdona?” al escuchar que su gallo era transexual y Andrea le ha explicado que era “una gallina en cuerpo de gallo, no cantaba, no montaba a las gallinas… Era muy cariñoso y se llamaba Susano”. Asegura tener una vida medio hippie “entre comillas, tengo agua, tengo luz, tengo internet…”. Respecto a como le gustaría que fuera su cita, le ha dejado claro al presentador que busca a alguien como ella, pero que primero le entre por el ojo “para que te entre por otro sitio, te tiene que entrar primero por el ojo”.
Jaime, su cita, asegura que él será DJ hasta que se muera “para la música no hay edad”. Es una persona abierta, simpatiquillo “no soy un carca ni mucho menos”. A Andrea le ha gustado mucho que fuera también de Zaragoza y que se pidiera un vino blanco como ella “lo que ha unido el vino blanco, que no lo separe nadie”. Tras un brindis, el presentador les ha llevado directos a la mesa para que comenzaran a conocerse.
Mientras decidían qué iban a cenar, Andrea ha querido saber si Jaime comía de todo y ella le ha dicho que de carne solo comía pollo y jamón, casualidad que él había sido cortador de jamón. El soltero le ha dicho que era de un pueblo de Zaragoza, que justo es el pueblo en el que ella lleva al veterinario a sus animales. Jaime ha flipado al saber que tenía gatos, perro y una gallina que se sentía gato “Igual en su casa hay que buscar sitio para sentarse, me gustan mucho los animales, pero suena a zoológico”.
El soltero no sale mucho por Zaragoza porque tiene varios trabajos y además de comercial es DJ en fiestas de pueblo, una profesión que a Andrea le ha hecho mucha gracia “pincha en la discomóvil, que eso es como otro nivel de verbena”.
Andrea tenía mucho calor y se han reído porque le ha dejado claro que era “calurosa, no he dicho caliente”. Jaime es divorciado y tiene una hija de 9 años, Andrea es madre de una hija de 33 y tiene dos nietos, el mayor de 14 años. Al saber que Andrea tenía 58 años y él solo 50, el soltero ha sentido que eso podía ser un problema “puede ser que me gusten más jóvenes”. Aunque, eso sí, ha tenido claro que Andrea era una mujer con la que te lo podías pasar muy bien.
En el reservado, se han atrevido con las bolas de amor y Jaime ha alucinado cuando ella ha leído “cierra los ojos y dale a tu pareja un beso en la almeja”. El soltero se ha reído muchísimo, pero ha tenido claro que jamás lo haría “por aquí, se va a Madrid”. Los dos se han reído muchísimo, se lo han pasado en grande, pero no han sentido nada especial para volver a tener una segunda cita de pareja.