José es un hombre de 81 años que asegura ser “un hombre que se viste por los pies” y que le gusta ser un caballero. Ha hecho mucha gimnasia y ha sido policía nacional “he hecho de todo incluso, el terrorismo”. Los últimos años se ha dedicado a la vida contemplativa, se ha casado dos veces, pero lleva 16 años solo y sin querer encontrar a nadie. Vive con su perrito y le gustaría que si cita en ‘First Dates’ sea una mujer sencilla, legal y que sepa respetar.
Isabel, su cita, es una mujer muy alegre a la que le gusta todo lo que da vida “me gusta el cantó, el baile, estar con la gente…”. Desde que se divorció cerró la puerta a la vida y no ha vuelto a estar con otro hombre, algo que a día de hoy, le pesa. José la ha recibido con una gran sonrisa y han comenzado a conocerse hablando de sus lugares de origen. Ella es de Málaga y él de Granada. Los dos han comenzado la cita nerviosos y les ha costado un poquito soltarse en la conversación, y es que ella, se esperaba a un hombre más alto y José no le ha gustado mucho.
La cena ha comenzado hablando de sus historias de vida. Isabel tiene tres hijos y José le ha contado que tenía dos hijos con una mujer y tres con otra, pero que las dos le salieron mal. Le ha contado que su primera mujer murió en un accidente de tráfico el día que su hija cumplía 16 años “una tragedia, se salieron de la carretera y cayeron por un barranco”. José está deseando dejar de lado la soledad porque para él ya es casi una enfermedad.
Isabel le ha contado que su marido viajaba mucho, que ella no le quiso acompañar en los viajes y que solo a fines de semana no se conoce a una persona. Había estado completamente cerrada al amor, pero ha venido a ‘First Dates’ con ganas de volverse a ilusionar y encontrar a una persona con la que poder compartir su vida.
José le ha contado que seguía practicando defensa personal y artes marciales, algo que era obligatorio en su trabajo. Isabel le ha contado que ella iba a natación, que hacía manualidades y que también iba a que le enseñaran a manejar el móvil. Él se ha mostrado muy participativo y le ha enseñado el Youtube.
El soltero le ha dicho que había recorrido muchos países de Sudamérica y le ha gustado que ella hubiera ido a Jerusalén para quitarse la espinita de montarse en avión. José no ha dudado en decirle que le estaba pareciendo “bien, una mujer muy simpática y muy sensata”.
En el momento de la decisión final, ambos han estado de acuerdo en que se podían aportar una amistad, compañía y lo que fuera surgiendo, y se han dicho que sí a seguirse conociendo.