Paula y Alba han hablado de música, de series y de arte, pero muy poco de amor. Y es que ambas han coincidido en un montón de cosas y tienen claro que como amigas se lo pasarían genial tomando unas cañas y tocando el ukelele.
Para Paula sus abuelos son sus pilares en la vida “son mi familia”. Desde que era pequeña comenzó a hacer teatro y el arte cambió su vida. Ahora se ha dado cuenta de que el gusta más mandar que actuar y está estudiando Producción Audiovisual. Está buscando a una persona que siempre tenga una sonrisa y que le transmita alegría. Es bixesual “pero poco, pocos hombres me han atraído en esta vida”.
Alba, su cita, se ha presentado como una chica simpática, un poco chulita y leal. Cuando las ha visto juntas, Matías se ha fijado en las cejas de las dos y así ha comenzado su cita. Paula la lleva depilada y Alba morada, algo que les ha hecho relajarse y comenzar hablando de pelos, lugares de origen y estudios.
Ya sentadas en la mesa y más relajadas, Alba le ha contado a su cita que iba a dejar sus estudios y que quería empezar un Grado de Ilustración y se había apuntado a Bellas Artes. Además, le ha confesado que ella también llevaba la palabra “ART” tatuada en el tobillo.
A Paula le ha apasionaba viajar y Alba le ha dicho que ella se planteaba pasar varios años viajando por el mundo, otra cosa que podían tener en común. Eso sí, Paula quería empezar por ir a Galicia a probar el pulpo y su cita le ha dejado claro que ni pulpo ni comida japonesa.
Paula ha querido saber qué no soportaría su cita en una relación y ella le ha dicho que le gustaba estar mucho a su bola y que no soportaría que su pareja tuviera una opinión política distinta a la suya. Y ella le ha explicado que ella no tolera los celos, que intenta ir de dura, pero que es “una cursi de mierda” y que es muy tierna y cariñosa.
Alba se ha asustado un poco porque ha sentido que Paula igual era demasiado tierna para ella “es de las que te llevan un caldo cuando estás mala”. Eso sí, le ha gustado que fuera espontánea y que le gustara improvisar planes tuvieran o no dinero porque ella al final se queda en casa.
La mayor parte del día, Alba está escuchando música y ha querido saber cuáles eran los gustos musicales de su cita porque cree que es algo muy importante que compartir en una pareja. Paula le ha contado que escuchaba rap y al saber que su cita ya pasó esa etapa y que ahora no le gustaba nada, le ha dicho que también le gustaba el rock y que le solía molar todo tipo de música “ahora estoy aprendiendo a tocar el ukelele”.
Algo que a Alba no le ha sorprendido en absoluto porque tiene claro que eso es el principio de todo “las bolleras tocan el ukelele, es un hecho”. Lo que sí le ha sorprendido es que Paula viera las series mientras se duchaba y que colocara su móvil junto a la mascarilla del pelo sin miedo a que se le mojara.
En el momento de la decisión final, las dos han tenido claro que se lo había pasado guay, que compartían un montón de cosas y que la cita había fluido, pero que querían volver a quedar solo como amigas.