Ni en la música ni en la ropa ni en la política… La cita de Pablo y María ha estado llena de contrastes y los dos se han dado cuenta en ‘First Dates’ de que no son de la misma derecha y que no podrían ser más que buenos amigos.
Pablo se está preparando las oposiciones a Policía Nacional y cree que es un trabajo que le va a encantar porque va a poder ayudar a las personas. Le gusta hacer planes improvisados y estar activo. Su exnovia le descubrió el mundo de la moda y le encanta ir a festivales y mercadillos de ropa. También juega al fútbol y su pasión por las Fuerzas de Seguridad le viene de familia, su abuelo y su tío eran también policías.
María, su cita, asegura que la gente le dice que es una chica “rebelde y muy loca”, pero suele caer bien a la gente eso sí, de primeras no suele gustar “luego me coges cariño”. Le gustan los chicos “heterobásicos de toda la vida”. Al ver a Pablo, le gustado lo que ha visto y se han puesto a hablar muy emocionados de sus profesiones. De hecho, estaban tan metidos en la conversación que no se enteraban de que Elsa les estaba invitando a pasar a la mesa “estáis en una nube”.
El aspirante a policía ha querido conocer las aficiones de su cita y María le ha contado que le encanta jugar a la consola y salir de fiesta, que en Toledo no sale tanto como en Barcelona, pero que siempre tiene algo que hacer. Pablo le ha contado que él no salía demasiado porque estaba estudiando, que jugaba al fútbol en un equipo y que le encantaba ir a festivales de ropa. María no sabía muy bien en qué consisten y ha sentido que no compartían aficiones.
En el tema de la música ella sabía que iban a pinchar y no se ha equivocado, a Pablo no le importa escuchar reggaetón de fiesta, pero prefiere la música electrónica, además está en un momento de su vida que prefiere ir a un parque o a una casa con amigos antes que meterse en una discoteca.
Respecto al tema sexual, María ha sentido que Pablo iba a ser también un poco paradito porque le ha contado que nunca le había pillado practicando sexo y que lo que más morbo le daba era la lencería y el cuello. A ella sí le sorprendieron sus amigos en pleno acto.
Ante la pregunta de qué harías si fueras el presidente del Gobierno, a María no le ha gustado que su cita quisiera “subir el salario mínimo y bajar las pensiones”. La joven ha querido saber de qué partido era Pablo y él le ha dicho que no era de ninguno y que no votaba, pero que si tenía que elegir, sería más de derechas. Ella no ha tenido ningún problema en contarle que vota a Vox y eso a Pablo tampoco le ha convencido “no creo que ningún extremo sea bueno”.
En el momento de la decisión final, los dos han tenido claro que no iba a surgir el amor entre ellos. Él podría tener algo con ella, pero no la ve siendo su pareja en un futuro. Ella también le ha visto más como un colega y cree que como amigos sería muy guay.