Vibradores, esposas, tríos, locales de intercambio, nata, chocolate, los baños de un avión… El tema sexual ha marcado el ritmo y la temperatura de la cita de Ángela y Alejandro. Una cita de mentalidad muy abierta que ha terminado con lágrimas. La soltera se ha roto al darle calabazas al peluquero canino.
Ángela es una persona liberal, de mente abierta y le gusta compartirlo todo. Ha estado casada 10 años y después ha tenido relaciones libres “busco a un chico, pero me gustan las chicas para jugar”. En ‘First Dates’ quiere encontrar a un chico con mente abierta, liberal, que le trate como una reina y si puede ser que es cuide físicamente.
Alejandro, su cita, es un chico fitness que hace muchísimo deporte y que busca a una chica deportista como él, algo que Ángela cumple a la perfección.
Alejandro y Ángela han comenzado a conocerse poquito a poquito, y su cena ha comenzado hablando de sus pasiones y trabajos. Ella es auxiliar de enfermería, pero trabaja en el ámbito social ayudado a las personas más desfavorecidas “mi trabajo es mi vida”. Él es peluquero canino, algo que le hace feliz y le estresa a partes casi iguales.
Superadas las preguntas de rigor, Ángela ha querido saber cómo era su cita en el terreno sentimental y ella le ha contado que era una persona liberal. Alejandro también se considera de mente abierta, pero ha tenido que ir tragando saliva poco a poco mientras que escuchaba a su cita contarle que le gusta ir a locales de intercambio, que le atraen las chicas y que le gusta compartirlas en pareja.
Alejandro en lo que a relaciones ser refiere es un tipo tradicional, pero no se cierra a nada y le ha despertado la curiosidad eso de hacer un trío con dos chicas “Nunca lo he hecho y me llama la atención, no hay que cerrarse a nada”, y es Ángela se lo ha pintado como un acto maravilloso “no sabes lo que te pierdes”.
A Ángela le encanta hablar de sexo y no ha dudado en contarle a Alejandro que le apasionan los juguetes, que siempre práctica sexo con lencería fina y tacones, que no le dice que no a unas esposas… Alejandro estaba encantado con la conversación y también le ha contado que el lugar más raro dónde lo había practicado era en el mar, pero que le encantaría hacerlo en el baño de un avión “ella tiene experiencia podría enseñarme”.
Ambos parecían estar más o menos en la misma onda sexual y estar dispuesto a probar texturas, sabores y olores juntos, pero no ha sido así. Alejandro le ha dicho que sí le gustaría repetir cita con Ángela y ella ha pasado un rato malo, muy malo. Con las lágrimas a punto de saltar de sus ojos y con pena por tener que decirle que no, Ángela le ha explicado que no era su tipo de chico “Físicamente no eres mi tipo de chico”. Al verla tan afectada, Alejandro le ha agarrado del brazo y le ha dicho que no pasaba nada, que estuviera tranquila.