Tres hermanas de Sevilla están viviendo una auténtica pesadilla. Tras la reciente muerte de sus padres, las jóvenes están recibiendo amenazas y lo peor de todo es que la mayoría de ellas se cumplen.
Desde hace dos meses, las advertencias que recibían en sus teléfonos móviles pasaron de la pantalla a la vida real y es un auténtico calvario el que están viviendo. Les han llegado a llenar la cerradura de sus domicilios de silicona y hasta han destrozado la furgoneta que era de su padre.
Pero eso no es todo. El último infierno que han sufrido es el incendio de su tienda de ropa, que, hace unos días, fue rociada con gasolina. ‘En boca de todos’ ha podido hablar con María e Isabel, dos de las hermanas, que han contado por lo que están pasando.
Las dos parientes aseguran que las amenazas comenzaron al poco de morir sus padres: “Sospechamos de alguien cercano a nosotras porque nos dice cosas muy personales de nuestra vida. Hace amenazas y luego las cumple”, apuntaba.
“No sabemos si es un familiar. Sospechamos que tiene que ser de nuestro entorno porque nos ha llegado a decir cosas que pasaron en el tanatorio de mi madre”, aseguraba una de las víctimas del incendio.
“Pedimos a estas personas que nos dejen tranquilas, pasar el duelo como podamos pasarlo, y que podamos seguir con nuestro negocio, que es el ingreso mayor que tenemos en nuestra casa”, añadían las hermanas, que pretenden reabrir el negocio lo antes posible.