Los taxistas viven un momento complicado, las agresiones de todo tipo han dejado de ser algo puntual y cada vez más, estos trabajadores, tienen que aguantar violentos clientes o incluso agresiones sexuales como le ha ocurrido a esta taxista de Barcelona. Aunque parezca difícil de creer, un cliente se ha empezado a masturbar mientras iba en el taxi y era grabado por las cámaras del taxi.
Elena Monge, una taxista amiga de la persona agredida, comenzaba diciendo, que justo a ella esto le ha pasado hace dos años y explicaba: "Te sientes muy mal, yo me di cuenta cuando ya iba a dejar al cliente pero eran las 6 de la mañana y buscaba que hubiese algún coche de policía o algún otro taxista".
Entre las diferencias con el caso que muestran las imágenes, la taxista cuenta que cuando ella para y le dice que se baje al cliente, éste le dice que no y termina de masturbarse: "Acabó la faena e incluso se limpió y me dejó papeles tirados por el coche". En referencia a como se da cuenta, Elena confiesa que ella escuchaba unos ruidos raros pero creía que provenía de una de las ruedas del coche, hasta que mira por el retrovisor y se da cuenta de lo que ocurre.
"¡Alucino en colores, cuantos cerdos hay que apartar de la calle!" le decía Nacho Abad a esta taxista ante estas declaraciones.
Para finalizar, Elena confiesa, que con estas cosas que le han ocurrido, se ha dado cuenta de lo vulnerable que son y apuntaba: "Estamos solas en un coche". Así mismo, la Guardia Urbana le ha asegurado que "no podían hacer nada porque no saben quién es" y que estas agresiones se quedan impunes.