Leire, una niña de cinco años, falleció cuando un coche a topa velocidad se cruzó en su camino y acabó atropellándola. El conductor del vehículo era un legionario que cuadruplicó la tasa de alcoholemia y que ni siquiera se bajó a atenderla.
Desde ese fatídico día la familia denuncia que el legionario intenta evitar a toda costa sentarse en el banquillo, hasta el día de hoy, cuando se ha celebrado el juicio en su contra y se le ha condenado a tres años de cárcel por homicidio imprudente. ‘En boca de todos’ ha hablado en directo con Deborah López, la tía de Leire, a la salida de los juzgados.
‘’Hoy ha sido un día muy esperado, pero también muy temido porque hemos revivido otra vez el accidente como si hubiera pasado hace diez minutos. Nos hemos cruzado de frente con un señor que no veíamos desde que murió mi sobrina Leire y lo tenemos todo a flor de piel’’, comienza explicando la tía de la víctima.
Respecto a cómo valoran los tres años de cárcel a los que se tendrá que enfrentar el legionario, Deborah ha respondido: ‘’Dentro de lo que podíamos aspirar que era un juicio por homicidio imprudente, bien está. Nosotros hubiéramos quedado más satisfechos si nos hubieran aceptado a trámite la petición de juicio por homicidio doloso porque pensamos que él es responsable totalmente de lo que hizo, no fue ninguna imprudencia, él sabía que había bebido, sabía lo que estaba haciendo cuando cogió ese coche, sabía lo que estaba haciendo cuando iba a 80 por una vía de 30, sabía lo que hizo cuando adelantó a un coche que estaba parado en un paso de cebra, se llevó a mi sobrina por delante y se bajó del coche con un cubata en la mano. Eso no es una imprudencia, es un cúmulo de decisiones y debería pagar con la máxima responsabilidad que se le pudiera pedir, pero no nos han aceptado la petición’’.
En cuanto a por qué la familia ha dado el paso de pactar con el legionario, la tía de la víctima lo ha explicado: ‘’Era la única manera de asegurar que entraba en prisión, si no pactábamos cabía la posibilidad de que al ser primer delito le condenaran a menos de dos años de prisión y ni siquiera llegara a entrar’’.
El programa ha accedido a la declaración que el acusado ha hecho durante le juicio de Leire:
‘’Sí, bebí unas cervezas, comí y bebí dos o tres cervezas. Antes de coger el coche me tomé una copa. Sé que había un vaso en el coche, pero no ingería mientras conducía. Era una tónica con ginebra. Yo no miraba el cuentakilómetros, no iba a velocidad excesiva. Era una carretera recta, larga y con varios pasos de peatones. Había poco tráfico. Cuando llegué a un punto me vi sorprendido con un coche. Giré y luego no pude evitar el impacto. Yo vi a la niña en milésimas de segundos. Me vi sorprendido por la niña. Frené e intenté esquivarla. Se paró el vehículo y yo me bajé porque sabía lo que podía haber pasado, estaba nervioso, intenté acercarme, pero la madre me increpó. Me aparté, la madre estaba muy nerviosa’’.