Durante la mañana de ayer, saltaba la noticia en los medios de toda España. Un cadáver se encontraba tirado entre dos vagones del tren en la estación de Santa Justa, en Sevilla. Rápidamente, aunque aún sin confirmación por la policía, todo el mundo pensó que podría ser el cuerpo sin vida del reciente desaparecido, Álvaro Prieto. Horas más tarde, la policía confirmaba que se trataba del cordobés desaparecido el día 12 de octubre en esa misma estación.
Según pasan las horas, poco a poco se va sabiendo más de lo que le pudo pasar a este chico de tan solo 18 años. Todo apunta a que se desplazó por encima de varios vagones y murió electrocutado al contactar con algún cable de alta tensión o con la catenaria del propio vagón, eso es lo que evidencia la primera autopsia preliminar.
Queda por saber los resultados de la autopsia que aún no se han conocido, solo hay un informe preliminar y la policía tiene muy presente las numerosas cámaras de seguridad de la zona. Hasta 4 cámaras hay en esa misma zona y justo una de ellas, situada en una gasolinera cercana, enfoca directamente al lugar donde apareció el cadáver.
Este martes, en exclusiva para 'En boca de todos', ha confirmado que la policía, cuatro días antes, revisó el interior del mismo tren donde se ha encontrado entre dos vagones el cuerpo sin vida del joven Álvaro Prieto. Según Nacho Abad, después de confirmarse que el joven murió por una descarga eléctrica, la policía ha recogido la "caja negra" del tren, para saber exactamente a qué hora se produjo la descarga eléctrica al joven y así poder calcular cuánto tiempo llevaba fallecido desde que se encuentra su cuerpo.