Como cada día desde que Daniel Sancho puede recibir visitas, su madre, Silvia Bronchalo, le ha visitado en la prisión de Koh Samui. A su salida hemos podido hablar con ella de nuevo y ha confirmado que se pondrá en contacto personalmente con la familia de E dwin Arrieta,el cirujano que habría sido asesinado y posteriormente descuartizado por su hijo.
El pasado viernes, para agradecer el gesto de los medios de comunicación de no hacerle preguntas tras su llegada a Tailandia, la expareja de Rodolfo Sancho rompía su silencio y revelaba que Daniel se encontraba "bastante bien", confirmaba que ambos se habían emocionado al verse y reconocía que "nadie te prepara" para vivir algo como lo que está viviendo su familia desde hace varias semanas.
Se trataban de las únicas declaraciones de Silvia hasta el momento, que este martes ha vuelto a hablar. Silvia se ha girado y, escueta pero contundente, ha revelado que se pondrá en contacto personalmente con la familia del doctor Arrieta: "De momento lo haré de forma personal".
En boca de todos' ha seguido este martes desvelando contenido de la más de una hora de entrevista exclusiva que ha conseguido con el número dos de la Policía de Tailandia, Big Joke.
A lo largo de esta conversación, Big Joke ha ido dando titulares que nos han permitido conocer datos hasta ahora ocultos sobre la investigación de Daniel Sancho, descuartizador confeso de Edwin Arrieta.
Big Joke ha confesado a nuestros compañeros del programa que, en realidad, Daniel Sancho nunca habría estado en la prisión de Kho Samui y que desde el principio habría estado ingresado en otro centro penitenciario.
El descuartizador confeso sería trasladado a diario a Kho Samui para ser interrogado por la policía y poder recibir las visitas de su madre.
Según Big Joke, Daniel Sancho estaría esperando a su novia en la isla tailandesa donde se encontró poco antes con el cirujano, lo que podría haber precipitado el asesinato.
Aunque el caso está cerrado para la policía tailandesa, se seguirían buscando pruebas. Además, asegura que la ropa la habría lavado Daniel y que por eso no tendría ningún resto de sangre.
El policía asegura que en el móvil de Daniel Sancho no contenía ningún mensaje amenazante de Edwin, ya que Daniel los habría borrado poco antes de que quedase a su disposición.
Surachate Hakparn fue monje budista tras ser apartado de la Policía tailandesa en 2019. Ahora, es el número dos y el encargado del caso de Daniel Sancho.