Un hombre armado con un machete entró en dos iglesias de Algeciras este miércoles por la tarde, acabando presuntamente con la vida de un sacristán y dejando a varias personas más heridas, entre ellas un cura. Después de intentar acceder a un tercer edificio religioso, donde le impidieron el paso, fue detenido por la policía local.
Nacho Abad ha dado los últimos detalles sobre el ataque, cuya investigación está en manos de la Policía Nacional y de la Audiencia Nacional al estar siendo tratado como posible caso de terrorismo.
La policía ya ha registrado su vivienda, una infravivienda en la que pagaba alquiler y en la que se han encontrado “varios pendrives, la funda del machete con la que asesinó al sacristán”, ha contado el periodista. Por el contrario, no se han hallado “elementos claros de radicalización ni más armas”, pero sí “elementos de radicalización en redes sociales en los últimos meses”.
Después de asaltar las iglesias de San Isidro y de La Palma, y de asesinar presuntamente al sacristán, el presunto asesino se dirigió a otra parroquia cercana, la capilla Europa. No pudo entrar porque las personas que estaban dentro cerraron y le impidieron el paso. “Comenzó a patear la puerta y gritaba ‘Alá, Alá’. No puede entrar, comienza a andar y la policía local le reduce, pero no intenta agredirles”, ha informado Nacho Abad.
Un joven de origen marroquí de 25 años irrumpió este miércoles por la tarde en dos iglesias armado con un cortacocos y habría acabado en plena calle con la vida del sacristán. Según los testigos, lanzaba proclamas sobre Alá e iba vestido con una chilaba negra.
El sacristán trató de interponerse al ataque perpetrado por el agresor, fue herido y, al intentar escapar, volvió a ser atacado en la calle, falleciendo.