Víctima de un pinchazo por sumisión química: "Me desplomé. Habría hecho lo que me hubiesen pedido"

La ola de pinchazos a mujeres que están de fiesta en lugares de ocio nocturno se reparte por varios puntos del país, lo que ha puesto en alerta a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

Las afectadas por esos episodios de sumisión química no tardan en notar mareos y malestares tras el pinchazo, que pueden acabar en pérdida de la consciencia. Además, cuando vuelven en sí suelen tener lagunas de memoria de varias horas, y no recordar por tanto qué pasó tras el pinchazo. Aunque los centros de diversión afirman haber aumentado las medidas de seguridad, incluyendo los tapavasos para evitar los intentos de meter algo en las bebidas, es un problema complicado de identificar con rapidez y eficacia. Por ello, es fundamental que las personas afectadas tomen una serie de medidas de precaución y adopten ciertas pautas de comportamiento después de recibir el pinchazo, para que el problema no vaya a mayores:

. Hacer caso a nuestras sensaciones

. Estar siempre acompañada

. Acudir a un centro sanitario lo antes posible

. Llamar al 112 Tramitar la denuncia

Miriam: "Pasó el 27 de julio en una discoteca de Barcelona y sentí un pinchazo"

'En boca de todos' ha podido hablar con Miriam, víctima de uno de estos pinchazos, que nos ha contado todo lo que pasó el día que la pincharon en una discoteca de Barcelona: "Pasó el 27 de julio en una discoteca de Barcelona y sentí un pinchazo. Lo primero que pensé era que alguien había pasado cerca y me había pinchado con unas llaves o algo así, pero luego me miré en la pierna me vi un pinchazo con sangre", empieza a contarnos esta joven que prefiere mantener el anonimato.

Miriam: "Avisé a los porteros y ellos llamaron al 112"

Tras ser pinchada, Miriam actuó de la mejor manera posible: "Avisé a los porteros y ellos llamaron al 112, ayudándome en todo momento. Al principio estaba bien, pero a los diez minutos aproximadamente me desplomé. Me llevaron de urgencias al hospital, pero no me hicieron ninguna prueba porque me dijeron que no tenían ningún protocolo instaurado, aunque me confirmaron que había sido víctima de una sumisión química por pinchazo", nos explica.

Miriam: "Si no llego a estar acompañada, habría hecho lo que me hubiesen pedido"

Miriam nos cuenta que los efectos le duraron aproximadamente dos horas y celebra haber estado acompañada en todo momento: "Si no llego a estar acompañada, habría hecho lo que me hubiesen pedido, ya que tenía la capacidad totalmente anulada".