La ley para abolir la prostitución sigue adelante gracias al voto a favor del Partido Popular. Algunos de sus puntos clave son los siguientes:
Vera es trabajadora sexual y está en contra de la ley. Cree que hay que regular la prostitución, pero “siempre trabajando con nosotras para que salga bien”. Ha contado que si la ley sale adelante tendrá consecuencias graves: “Lo que va a pasar aquí es que a todas las mujeres extranjeras se les va a negar el alquiler e la vivienda por sospechar que son prostitutas, aunque no lo sean”. Además, dicen que puede obligar a muchas mujeres a recurrir a mafias o a clientes que les proporcionen una vivienda.
También está en contra de que se persiga a los proxenetas porque “no todas podemos organizarnos”: “A veces necesitamos dinero urgente y solo queremos trabajar poco tiempo, en ese caso nos vamos a un piso o a un club. Yo lo veo como una violación de mis derechos”.
Vera ha asegurado que, en los 17 años que lleva en el sector, nunca ha conocido “a ninguna víctima de trata”.