El crossfit, uno de los deportes más emergentes de los últimos años, nos permite muchas soluciones para mantenernos en forma. De una forma fácil y sencilla, podemos entrenar con ejercicios cargados de intensidad que activan todo nuestro cuerpo.
Dentro del laborioso mundo del crossfit encontramos un montón de posibilidades y tipos de ejercicio. Si no estáis demasiado familiarizados con la rutina de este mundo fitness y el significado de sus ejercicios, vamos a tratar de aclararos más de qué se trata y profundizar en alguno de sus aspectos.
Dentro del box de un recinto de crossfit habréis escuchado terminologías de lo más variopintas. Una de ellas son los ejercicios AFAP. Una forma abreviada de decir que esa ronda la tenemos que hacer “As Fast As Possible”, o lo que es lo mismo, con la mayor rapidez posible.
Básicamente, y en resumidas cuentas, los ejercicios AFAP consisten en completar una serie de ejercicios o determinada cantidad de repeticiones y registrar el tiempo en que se realiza intentando realizarlos en el menor tiempo posible.
Los beneficios de los ejercicios AFAP son varios. En primer lugar, y como no podía ser de otra manera, mantienen a nuestro cuerpo en activación, exprimiéndolo al límite con el objetivo de superar la marca anterior que tuviéramos establecida y así sucesivamente. El afán de superación que viene implícito con el mundo del crossfit, pocos deportes lo tienen.
Esto repercute, claro está, al aspecto mental. Si comprobamos que superamos nuestros registros es un claro indicador de que estamos por el buen camino. Esto hará que nuestra autoestima y moral crezca hasta límites insospechados. Querremos más y más.
Así pues, los AFAP nos incitan a realizar un movimiento o una serie del mismo tan rápido como sea posible. Una lucha contra el crono con la que nos sentiremos deportistas de élite. Con todos los beneficios anímicos y físicos que ello conlleva.
La ventaja que tienen los ejercicios AFAP es que podremos realizarlos con las pruebas más comunes del mundo del crossfit. El objetivo es hacer flexiones, burpees, abdominales, repeticiones con peso, sentadillas o circuitos en general y medirnos contra el crono con el fin de, cada vez, hacerlo más rápido. Señal inequívoca de que estamos trabajando bien y de que nuestra fortaleza física no ha dejado de crecer.
Con el crossfit entrenamos todo nuestro cuerpo y es recomendable ir alternando entre los diferentes tipos de ejercicio para obtener un resultado óptimo. Los ejercicios AMRAP –hacer el mayor número de rondas posibles en el tiempo estipulado- son un buen complemento para los ejercicios AFAP.