Sufrir un robo en tu propia casa, a parte del daño económico, es un mazazo en lo anímico. El ciclista Mark Cavendish lo sufrió en sus propias carnes a finales del mes de noviembre y ahora ha querido narrarlo en una carta que nos ha dejado a todos con los pelos de punta. Él y su familia fueron objeto de un robo con extrema violencia en su propio domicilio.
El ciclista británico Mark Cavendish dijo estar "extremadamente angustiado" tras haber sido asaltado en su domicilio por cuatro ladrones armados con un cuchillo que amenazaron a su mujer mientras sus hijos estaban en casa el pasado 27 de noviembre.
Cuatro intrusos entraron en la casa de Cavendish en Inglaterra en lo que la policía describió como un "incidente selectivo" "incidente selectivo"en las primeras horas del 27 de noviembre, un robo que ha sido desvelado este miércoles, mientras el corredor se recuperaba de lesiones de un accidente en Bélgica.
La policía dijo que el grupo agredió a Cavendish, de 36 años, y amenazó a su esposa Peta en presencia de sus hijos pequeños. Cavendish explicó en una publicación de Instagram que "los cuatro hombres enmascarados y armados entraron a la fuerza" en su casa mientras dormían. "Amenazaron a mi esposa e hijos y me atacaron violentamente".
"A punta de cuchillo procedieron a saquear nuestras pertenencias", añadió Cavendish en su declaración policial. Ninguno de los miembros de la familia sufrió heridas graves y los ladrones se fueron, robando una maleta Louis Vuitton y dos relojes de alto valor, dijo la policía.
"Como estoy seguro de que comprenderán, este incidente ha dejado a nuestra familia extremadamente angustiada, no solo a mí y a Peta, sino a nuestros hijos también, que temieron por sus vidas y ahora están luchando con las secuelas", indicó.
"Nadie debería tener que experimentar este tipo de violencia y amenazas, y mucho menos que esto suceda en un hogar familiar, un lugar donde todos deben sentirse seguros (...) Los artículos robados son simplemente bienes materiales y nuestra prioridad en este momento es asegurarnos de que todos nos recuperemos del incidente como familia, y sabemos que es probable que esto lleve algún tiempo", finalizó.
El ciclista británico, campeón del mundo y subcampeón olímpico, llamó a la policía a las 2.35 am del sábado 27 de noviembre y todavía no se han realizado detenciones.