Las redes sociales, si se utilizan como es debido, pueden servir de altavoz para pedir ayuda o para que las historias lleguen a más gente. Es el caso de Alexandra Ianculescu, la ciclista que contó su la situación que estaba atravesando por su perfil de Instagram, los medios se hicieron eco de ella y los usuarios se han solidarizado con la deportista.
Alexandra, que es una deportista canadiense que participó en los Juegos Olímpicos de Invierno en 2018 en Corea en la prueba de patinaje de velocidad y ha dado el salto al ciclismo para participar en los Juegos de París 2024, contó que, a pesar de dedicar su vida al deporte, su carrera como deportista profesional no era suficiente para conseguir llegar a fin de mes. La ciclista confesó que se creó una cuenta de la conocida plataforma de Only Fans, después de una sugerencia de un amigo, para generar ingresos a través de publicar imágenes y vídeos íntimos, que le permitan llegar a fin de mes y "sobrevivir".
Su historia se hizo viral mundialmente y ahora las redes sociales se han volcado con ella. En sus publicaciones está recibiendo miles de mensajes de apoyo e incluso algunos le proponen que ingrese en su empresa de representación para tener más visibilidad: "Te he dejado un mensaje sobre los patrocinios de 2024, creo que mi agencia puede ayudarte a seguir creciendo", escribía un usuario.
Contar su historia ha tenido un impacto en la sociedad, pero también en sus redes sociales. Alexandra ha conseguido aumentar en miles sus seguidores en Instagram, aunque también es cierto que, las visualizaciones a su perfil de la plataforma de contenido para adultos ha disminuido casi un 60% en las últimas horas, según ha publicado ella misma en sus historias.