Conor McGregor vuelve a estar en el centro de la polémica. Las autoridades de España han reabierto el caso de una supuesta agresión por parte del luchador de la MMA a una mujer en un yate mientras celebraban su cumpleaños en las playas de Ibiza.
Los hechos, que ocurrieron el pasado 17 de julio de 2020, apuntan a que ambos se encontraban en el 34º cumpleaños del luchador cuando McGregor se volvió totalmente loco después de que un amigo ayudase a la mujer. "Todo su comportamiento cambió en ese momento y se volvió muy agresivo. Era como si estuviera poseído. Sabía que tenía que salir del barco porque pensaba que me iba a matar", aseguró la denunciante.
Según ha informado la mujer, primero le dio una patada bajo el ombligo y después un puñetazo en la barbilla. Se abalanzó hacia ella y la amenazó con ahogarla. Poco después, una embarcación llevó a la mujer a la playa más cercana y ella se dirigió a la Guardia Civil para interponer una denuncia.
Las autoridades decidieron archivar el caso debido a la falta de pruebas por parte de la denunciante. La mujer aseguró que se encontraba en estado de shock, que le impedía realizar una declaración, y en bikini, por lo que no se encontraba a gusto para contar todo lo ocurrido.
Ahora, varios años después, las autoridades de Formentera han vuelto a reabrir el caso a petición de los abogados de la mujer de 42 años. Según las informaciones, ambos se conocían desde pequeños por haberse criado en el mismo lugar y por ello se encontraba invitada a la fiesta.
"Tenemos amigos en común y me he encontrado con él en numerosas ocasiones. No puedo creer lo que me ha hecho. Es un criminal. Creo que me habría matado si no me hubiera bajado del yate", declaró ante la policía de Irlanda, con los que habló poco después de llegar al país.