Cuando se acaba la temporada, los aficionados del deporte esperan con ansias que sus clubes anuncien la nueva equipación del equipo, pero en muchas ocasiones estos se llevan una decepción y no entienden muy bien por qué se ha elegido ese diseño.
Sin ir más lejos ha ocurrido con el Atlético de Madrid. En cuanto sacaron la camiseta de la temporada 2022/2023 saltó la polémica. Dejaba atrás las rayas verticales rectas para dar paso a unas curvas inspiradas en el río Manzanares para recordar donde estuvo al Vicente Calderón y sus aledaños.
No ha sido una crítica de unos pocos, sino de las propias peñas atléticas que se han movilizado para trasladarle al club su descontento. Le han pedido más respeto por las señas de identidad del club como puede ser esas rayas verticales.
El club de Voleibol Río Duero quiso llevar uno de los alimentos más típicos en la propia camiseta. El equipo en 2020 lució una de las indumentarias más extravagantes vistas en el deporte. La institución utilizó las palabras “sabrosa” y energética” para promocionar la camiseta, aunque esta con la imagen se hacía sola.
El Guijuelo, años antes de esto, también optó por llevar comida en la elástica. En la temporada 2015/2016 sacaron uno en donde el jamón ibérico era el protagonista. Fue tal el éxito de acogida que en 2019 sacaron otra versión de la “Jamoneta”.
Fue tal la dimensión que alcanzó el diseño de la camiseta de La Hoya de Lorca en 2013 que adquirió el mote del ‘Brócoli Mecánico’. Fue la segunda equipación en donde el brócoli era el protagonista absoluto de la elástica del equipo de Segunda División B por aquel entonces.
El Deportivo Lugo quiso llevar por bandera uno de sus productos más internacionales. Sacó dos diseños distintos en donde la cerveza y el pulpo eran los protagonistas. Esta camiseta traspasó fronteras e incluso diarios alemanes hablaron de ella.
El Palencia llevó los límites de la excentricidad hasta el extremo. Para la fase de ascenso a Segunda División B sacó una camiseta que muchos la recuerdan como la más horrorosa que ellos definían como “más impactante de la historia del fútbol”. En ella estaba representada todos los músculos del cuerpo humano.
La Cultural Leonesa quiso llevar la elegancia al césped. Diseñó una camiseta que representaba a un esmoquin para jugar el torneo 3x3 por la minería que disputó el 30 de julio de 2014 ante el Real Sporting de Gijón y la SD Ponferradina.
El Athletic quiso celebrar la vuelta a la Europa en la temporada 2004/2005 de una forma muy excéntrica. El encargado de realizar el diseño de la camiseta fue Darío Urzay y este quiso cambiar el diseño de las líneas tradicionales por algo más rompedor. Tanto que muchos pasaron a denominarla “camiseta kétchup”. Esto trajo un sinfín de críticas y no se volvió a reproducir.
En el caso de la equipación del Recreativo de Huelva en 2012 fue más allá. El equipo sacó en julio de 2012 la indumentaria para la próxima temporada y fue tal el revuelo y el descontento que se llegaron a convocar manifestaciones. La segunda camiseta fue la causante al presentar lunares blancos en un fondo rojo.