Carlos Alcaraz ha aprovechado su viaje a Estados Unidos para disputar el Open de Miami para ir a ver un partido de la NBA. Los Miami Heat han invitado a numerosas caras reconocidas a ver su partido frente a los New York Knicks.
Alcaraz se ha rodeado de personas de la elite mundial como Maluma, Anuel, Dwyanewade o Alexzverev. El equipo de Miami ha colgado en sus redes sociales unas fotografías de todos ellos sentados en las gradas de su pabellón, Miami Dade Arena. En el pie de foto dejaban claro que "las estrellas están en Miami".
El tenista ha podido tirar algunas canastas en la pista del estadio y le han regalado una camiseta del Miami con el dorsal número 23 y su nombre. Carlos está en la ciudad americana como una estrella mundial más.
Alcaraz llega a Miami tras conquistar el cuarto Masters 1.000 de su carrera en Indian Wells, con una exhibición ante el ruso Daniil Medvedev que también le devolvió la primera posición en el ránking mundial.
El español Carlos Alcaraz llega al Masters 1.000 de Miami sin sentir "demasiado la presión" por ser el vigente campeón y aseguró que sabe lo que tiene que hacer, jugar "relajado". "No siento demasiado la presión, sé lo que tengo que hacer. Tengo que jugar relajado y no enfocarme en si estoy perdiendo o en si estoy jugando bien. Mi objetivo siempre es el mismo, sentirme cómodo en pista", afirmó Alcaraz en su primera rueda de prensa en Miami.
"Quiero disfrutar del tenis e intentar pensar positivo cuando juego. Es por eso que ahora estoy jugando a un buen nivel. Disfruto de cada segundo y juego relajado", agregó.
Para mantener el liderato en el ránking, Alcaraz, de 19 años, debe confirmarse como campeón en Miami. De no hacerlo, el serbio Novak Djokovic, ausente por su negativa a vacunarse contra el coronavirus, recuperará el cetro.