Fernando Alonso se recupera ya de la operación de mandíbula a la que fue sometido el pasado viernes después de que sufriera un atropello cuando entrenaba en bicicleta en Suiza. El piloto asturiano tendrá una recuperación exprés y es que en menos de un mes tendrá que volver a subirse al monoplaza para empezar la nueva temporada de Fórmula 1.
El dos veces campeón tiene entre ceja y ceja una fecha: los primeros y únicos entrenamientos de pretemporada que se celebrarán los días 12, 13 y 14 de marzo en el circuito de Sakhir en Baréin. Aunque las cirugías de fractura de mandíbula suelen tener un mes como mínimo de recuperación, Fernando Alonso quiere acortar tiempos para estar preparado al 100% para el inicio de temporada, que tendrá lugar la última semana se marzo en Baréin.
Alonso, quien mandó un tranquilizador mensaje desde el hospital de Berna en donde ha sido operado, aseguró que estará preparado para la primera carrera de la temporada, y que este imprevisto no le supondrá perderse el inicio del campeonato que tendrá lugar en Baréin. Aunque al piloto asturiano se le ha recomendado reposo absoluto, en unos días tendrá que volver a ponerse el casco.
Aunque a priori se puede pensar que le producirá mucho dolor en la zona de la mandíbula, es más bien todo lo contrario, ya que el casco actuará como una férula que le irá ayudando progresivamente a la corrección de la fractura. Por lo tanto, el piloto de Alpine tendrá que llevar en las primeras carreras del año un casco ligeramente modificado.
No habrá que esperar una gran revolución con respecto al resto de cascos usados por sus pilotos rivales, sino que llevará pequeñas modificaciones en el interior del mismo. Lo cascos de los pilotos están altamente regulados por la FIA para cumplir a rajatabla todos los estándares exigidos, con lo que las variaciones para ayudarlo serán mínimas. Se habla de pequeñas reconstrucciones a base de escayola en la zona de la mandíbula inferior así como unos pequeños estabilizadores en la zona pegada a los dientes para que estos estén lo más inmovilizados posible.
Pese a que se hará lo imposible para que Fernando Alonso pueda correr con el mínimo dolor posible, es obvio que el piloto asturiano tendrá que lidiar con un mal compañero de viaje durante las primeras carreras. Uno de los consejos que se le darán será el no apretar los dientes mientras lleve el casco puesto, ya que esto retrasaría la corrección de la fractura, produciéndole además un dolor agudo.
Sea como fuere, Fernando Alonso estará subido a su nuevo monoplaza de Alpine cuando el semáforo se apague en el circuito de Sakhir el próximo 28 de marzo, dando así el pistoletazo de salida al nuevo Mundial de Formula 1 y certificando así su regreso l 'Gran Circo'.