El Gran Premio de Arabia Saudí de Fórmula 1 está en jaque a estas horas. Un misil ha caído en las instalaciones de Aramco en Jeddah, a escasos kilómetros del circuito donde se estaban disputando los primeros entrenamientos libres de este viernes. No es el primer ataque contra edificios importantes en los últimos días.
La semana pasada fueron varios los ataques con misiles que hubo en la ciudad, pese a ello, la Fórmula 1 dio el visto bueno a que el Gran Premio se disputara con total normalidad. Este viernes, el paddock se sorprendía al ver una gran humareda en mitad de los primeros entrenamientos libres.
Pocos minutos después empezaron a trascender vídeos de una gran explosión tras el ataque con un mísil a la refinería petrolífera de Aramco en la ciudad, que además es patrocinador global de la Fórmula 1 además de algunos equipos. Son muchas las voces que piden la suspensión del Gran Premio y no volver a correr en este país nunca más. El ataque habría sido llevado a cabo por los hutíes, un grupo insurgente que opera en Yemen.
El monegasco Charles Leclerc (Ferrari), líder del campeonato, marcó el mejor tiempo este viernes en el primer entrenamiento libre para el Gran Premio de Arabia Saudí, el segundo del Mundial de Fórmula Uno, que se disputa en el circuito urbano de Yeda, a orillas del Mar Rojo.
En su mejor vuelta, Leclerc cubrió los 6.175 metros de la pista de Yeda, con neumático blando, en un minuto, 30 segundos y 772 milésimas, 116 menos que el neerlandés Max Verstappen (Red Bull), último campeón del mundo, que marcó su vuelta rápida con el compuesto duro, en una sesión en la que el finlandés Valtteri Bottas (Alfa Romeo) firmó el tercer crono, con el blando, a 312 milésimas del monegasco.
La segunda sesión, que será más orientativa, al disputarse en el mismo horario que la calificación y la carrera (de noche y con luz artificial).