Corría el minuto 85 del partido entre el Preußen Münster y el Würzburger Kickers de la tercera división alemana. Leroy Kwadwo, jugador ghanés del equipo visitante, recibe insultos racistas por parte de un aficionado.
El jugador inmediatamente se encara con la zona de la grada de la que proviene el insulto, y los aficionados responden. Los hinchas del Preußen Münster de esa zona, señalan y detienen al aficionado que profirió los gritos. La policía echó del campo al agresor, mientras que todo el estadio grita "Nazis fuera".
Kwadwo recibió el apoyo, no solo del estadio, sino de todos los jugadores y personal que estaban en el campo. El partido se reanudó tras el incidente. El marcador final fue de empate a 0 entre los dos equipos, pero lo ocurrido quedará de ejemplo para todo el mundo.