En 2017, Santi Mina pertenecía a las filas del Valencia. Tras una noche de fiesta en Mojácar, Almería, tanto él como otro jugador gallego, David Goldar, fueron denunciados por presunta agresión sexual a una joven en una caravana. El caso se abrió en junio de 2017 y la pasada semana se ha reabierto el caso.
La juez ha resuelto dictar auto de incoación de sumario, de fecha 22 de noviembre, a instancias del Ministerio Fiscal, después de dar por concluida la fase de instrucción de la causa y concluir que existen indicios suficientes para que ambos vayan a juicio, según han confirmado a Europa Press fuentes judiciales.
Mina, que actualmente juega en Primera División en las filas del RC Celta de Vigo, fue detenido en junio de 2017 en el municipio de Mojácar después de que la víctima denunciase ante la Guardia Civil que le había sometido a tocamientos.
En concreto, relató que la presunta agresión sexual se produjo cuando estaban en una caravana con un amigo del delantero, el también futbolista gallego David Goldar, con el que había pasado la noche en un local de copas y también investigado en la causa. Goldar milita actualmente en el Gimnastic de Tarragona.
La joven también afirmó que quien era en el momento de los hechos investigados jugador del Valencia CF había entrado desnudo en el vehículo y que había intentado mantener relaciones sexuales con ella, relaciones que, finalmente, no se llegaron a producir.
Tras producirse la detención en junio de 2017 y el posterior paso a disposición judicial, desde el entorno del jugador del Celta de Vigo confirmaron la veracidad del asunto pero aseguraron que ha habido "una versión exagerada" de los hechos por parte de la joven que denunció.