España ha logrado acabar la temporada de la mejor manera posible: con victoria cómoda ante República Checa, con buenas sensaciones y con el liderato de grupo de la UEFA Nations League. Luis Enrique se ha llenado de crédito y los nuestros ya tienen en el horizonte llegar bien preparados para intentar hacerlo lo mejor posible en el Mundial de Catar.
La selección española de fútbol venció (2-0) este domingo a la República Checa en la cuarta jornada de la Liga de Naciones, celebrada en el Estadio de La Rosaleda de Málaga, para cerrar el maratón internacional antes de las vacaciones como líderes del Grupo 2, gracias también a la derrota de Portugal ante Suiza (1-0).
Los de Luis Enrique Martínez se merecen la confianza del aficionado. Lo hicieron en la pasada Eurocopa o en la clasificación para el Mundial, hasta el rabo todo es toro, y en una plaza engalanada como la malagueña, la 'Roja' brindó una tarde de las que hacen afición a la selección, con los goles de Soler y Sarabia.
Después de empatar contra Portugal y con los checos, España da la vuelta a la tortilla con sus triunfos ante Suiza, el jueves en Ginebra, y ahora esta victoria que, con el favor luso, les coloca en posición preferente para repetir 'Final Four'. Los de Luis Enrique (8 puntos) defenderán el primer puesto y ese billete a los cruces el 24 y 27 de septiembre ante Suiza, en casa, y Portugal (7), fuera.
La selección masculina, que jugó con la camiseta de la femenina en apoyo a su inminente participación en la EURO, se ganó las vacaciones después de las dudas y la dificultad que no ha sido exclusiva en los de 'Lucho'. El torneo tiene contra las cuerdas a muchas favoritas, con las piernas cargadas y todo en el aire.
Como última faena, a España le tocó una República Checa que ya estuvo cerca de ganar a la 'Roja' en Praga hace una semana, salvado el empate en el 91' por Iñigo Martínez. El inicio fue de tremenda exigencia y los checos incluso llegaron a hacerse con el partido y las ocasiones, en una fuerte presión que dejó varias pérdidas en los locales, en especial de Marcos Alonso, obligando a Unai Simon.
España salió con calidad, motivada por el gran ambiente en La Rosaleda, pero esa pérdidas generaron dudas. Cerny rozó el gol visitante con un disparo desde la frontal y Kuchta tuvo un mano a mano con Simon. El inicio era ya checo cuando España encontró el gol antes que el juego, con una jugada sencilla entre Koke, Asensio y la entrada de Soler para hacer el 1-0 cerca de la media hora.
Los de 'Lucho' trataron de aprovechar el subidón y llegaron con mucho peligro, reclamando incluso un penalti sobre Asensio. Soler pudo hacer el doblete y los checos perdieron su alegría hasta el descanso para tratar de no encajar otro gol. En la segunda mitad, de nuevo apretó el equipo de Jaroslav Silhavy.
Pesek tuvo el mayor acercamiento checo hasta que Luis Enrique dio entrada a un Gavi que, aclamado por la grada, revolucionó el partido a su antojo. El joven jugador del Barça dio el mando a España en la media hora final, con muy poco ya del rival, soltando la 'Roja' su juego ofensivo antes de hacer las maletas del verano.
En una buena salida de Eric García, muy criticado desde la ida ante los checos, el pase de la muerte de Asensio no encontró remate, pero en jugadón de Gavi, bien continuado por Dani Olmo y Ferran, Sarabia hizo el 2-0 recién entrado al campo. España, finalista de la pasada Liga de Naciones, carbura ya con ganas de repetir.