Gavi es la mejor noticia de la Selección Española en el descafeinado empate (2-2) ante la República Checa. El medio del Barcelona ha hecho historia al anotar con 17 años y 304 días y convertirse en el más joven en hacerlo con la camiseta de La Roja. Luis Enrique se ha deshecho en elogios y Gavi solo piensa en ser líder y titular en el próximo Mundial de Catar.
El seleccionador nacional de fútbol explicó que la República Checa les planteó la defensa más "agresiva" y buena que recuerda, y celebró el empate sobre la bocina (2-2) en la tercera jornada de una apretada Liga de Naciones.
"El partido lo he visto complicado desde la primera jugada y no hemos estado cómodos en todo el partido. Hemos tenido más llegadas pero nos ha costado mucho en la primera parte superar a un rival replegado, fuerte y agresivo", dijo en rueda de prensa.
El técnico asturiano explicó que los fallos en los goles checos son culpa de todo el equipo y no de la defensa solo. "Algunos desajustes han generado que nos llegaran, hemos tenido dificultades. En la primera parte no hemos tenido claridad a excepción del gol de Gavi y en la segunda hemos tenido dos palos, hemos llegado más, pero nos ha costado muchísimo. No recuerdo un equipo que nos haya defendido de esta manera tan agresiva y tan bien", apuntó.
Gavi, un ejemplo para todos
'Lucho' fue preguntado por un Gavi que se convirtió en el goleador más joven de la historia de la selección. "Llevo viendo vídeos de Gavi cuando tenía 13, lo que sorprende es que con 17 años sea capaz de hacer esto. Si había un jugador de España convencido en el campo, era Gavi. Tira o se mete en el área, esa convicción es impagable. Todos destacan su raza y carácter y lo que hace sin balón, y lo que hace con balón es mucho mejor. Si se contagia la convicción de Gavi sería maravilloso", apuntó.
El preparador de la selección destacó también la energía de Asensio, con su entrada en la segunda parte, y explicó que, sin tener un buen día, España mereció el empate ante un rival que les exigió mucho con su juego defensivo y los balones a la espalda. "Cuando hay desajustes es desde el número 9, hay que controlarlo entre todos. Hoy no era el día, aparte le sumamos el poderío físico de este equipo, nos ha costado", afirmó.
"Para superar a un rival replegado de esta manera con esta agresividad necesitas desborde, fluidez de balón, combinaciones rápidas, centros y remates, disparo de fuera del área. La segunda parte hemos mejorado. El resultado es más justo el empate. El rival no suma tres puntos. ¿Dudas? Ninguna. No hay ningún equipo que haya estado en dos 'Final Four', va a estar justo hasta la última jornada", añadió.
Además, Luis Enrique reconoció que tienen que mejorar. "Ruido es lo más bonito en el mundo del fútbol, estamos vivos, sé a lo que juego, dónde estoy, es un cargo de responsabilidad. Cosas a mejorar, muchas, yo el primero", terminó.