El Barcelona se llevó los tres puntos ante el Villarreal tras ganar 1-2. Al equipo de Koeman le tocó remontar. Chukwueze adelantó al submarino amarillo en el 26, pero llegó Griezmann para darle la vuelta el partido que no le faltó de nada, ritmo, ocasiones y juego. Solo un minuto después el delantero francés batió a Asenjo para hacer el empate y en el 35 tras un error defensivo puso por delante a su equipo en el marcador. En el segundo tiempo, el Barcelona bajó una marcha y el Villarreal dominó a pesar de quedarse con 10 por la expulsión de Manu Trigueros tras una entrada a Messi. Los azulgranas no fallaron en su lucha por La Liga.
Partido con mucho ritmo y con fútbol el que se vivió en La Cerámica. Los dos equipos salieron a buscar los tres puntos y tuvieron opciones desde el principio. La primera se la apuntó el Barça con una dejada de De Jong a Griezmann que la defensa salvó justo a tiempo. El Villarreal se acercaba, pero las más claras caían para los azulgranas.
Sin embargo, sería el submarino amarillo el que golpeara primero. Chukwueze recibió un balón en largo desde su campo que llegó hasta el delantero, en el momento menos indicado, Jordi Alba se resbaló y permitió al jugador nigeriano quedarse solo ante Ter Stegen que le recortó y marcó el 1-0 en el 26.
Estaban todavía saboreando el tanto cuando Griezmann puso la igualada. Solo un minuto después Mingueza le puso un balón al delantero francés y este ante la salida de Asenjo la picó para poner el 1-1.
Antoine estaba animado y quería más. Un error defensivo se lo puso en bandeja. Foyth quiso ceder el esférico a su portero y el delantero culé andaba por allí y le arrebató para quedarse solo ante Asenjo y de nuevo le ganó la batalla para adelantar al Barcelona en el marcador 1-2 en el 35 de la primera mitad. Antes de irse a vestuarios, los de Koeman tuvieron alguna opción más, pero con ese resultado se terminaría el primer tiempo.
El comienzo de la segunda mitad también fue con un ritmo alto de juego. El balón fluía, pero las ocasiones no eran tan abundantes. El Villarreal tuvo opciones de empatar con un disparo de Capoue desde la frontal del área que desbarató Ter Stegen. Los de Emery dominaron la posesión y al Barça se le notó la falta de piernas.
La balanza se decantó para el Barcelona tras una dura entrada de Manu Trigueros en el 64 a Messi a la altura del domingo que el árbitro no dudó y le mostró la roja directa. A pesar de quedares con uno menos, el Villarreal lo intentó hasta el final y tuvo ocasiones para poner la igualada. El Barça pegó un bajón físico y no parecía que estuvieran con un jugador más sobre el césped.
No cerró el partido y hasta el final estuvo sufriendo, pero ese doblete de Griezmann le valió para llevarse los tres puntos que le mantienen en la pelea por La Liga y le ponen tercero con 71 puntos igualando al Madrid con un encuentro pendiente.