La vuelta de Cristiano Ronaldo a Portugal es una realidad. El delantero está como loco por salir de Italia y tras frustrarse su deseo de volver al Real Madrid tiene encima de la mesa la propuesta para regresar al Sporting de Portugal, su club de infancia.
El conjunto de Lisboa es el reciente campeón de Liga y disputará la Champions el próximo año, torneo que no tiene asegurado en este momento la Juventus. Cristiano es el centro de las críticas desde la eliminación en Champions ante el Oporto y desea romper el año que le queda de contrato con los turineses.
En la fiesta liguera del Sporting Dolores Aveiro, madre de Cristiano, fue más allá con una promesa pública: “Me voy a Italia para hablar con él. El año que viene jugará en el Alvalade, lo convenceré".
Estas rotundas palabras a las cámaras de ‘Tvi24’ no han hecho otra cosa que aumentar las esperanzas de la afición lisboeta ante el regreso del portugués al club desde donde salió en el año 2003 rumbo al Manchester United.
Se ha filtrado que para conseguir esta vuelta a Portugal, Cristiano Ronaldo está dispuesto a renunciar a prácticamente la totalidad de su salario. El luso gana más de 30 millones netos en la Juventus pero tiene claro que en esta etapa final de su carrera el dinero es secundario.
Cristiano Ronaldo ya está preparado su vuelta a Portugal con toda su familia. Salió siendo un niño y ahora vuelve como padre de familia. El portugués ha adquirido recientemente un lujoso ático en Lisboa, valorado en más de siete millones de euros.
La vivienda, que compartirá con Georgina Rodríguez y sus hijos, está situada en la planta 13 de la Rua Castilho de Lisboa, dentro del edificio Castilho 203, es una construcción ultra ‘premium’ promovida por Vanguard Properties.