Raúl de Tomás ya es nuevo jugador del Rayo Vallecano. En los meses del mercado de verano no se pudo realizar la operación y es ahora cuando el club perico le ha vendido por ocho millones a la entidad madrileña. Se convierte así en el traspaso más caro de la historia del club rayista que permanecerá ahí hasta el 2027.
La operación ha sido redonda para el Rayo, que ficha al jugador por cinco temporadas por un precio muy inferior al que pagó el Espanyol en enero de 2020 al Benfica, cuando desembolsó 22,5 millones de euros.
El regreso a Vallecas del atacante internacional se produce por la firme voluntad del jugador de volver al equipo madrileño, de salir del Espanyol ante la mala relación con el técnico Diego Martínez y de seguir en la Liga española desechando ofertas de mayor cuantía económica de países de Oriente Medio.
El fútbol puede ser poesía cuando alguien gana y desidia, malestar y hasta enfado cuando pierde. Con Raúl de Tomás ha pasado igual. Los seguidores blanquiazules aplaudían y vibraban con sus 45 dianas engominadas en las tres temporadas, si no añadimos la actual, que ha militado en el RCDE Stadium.
Sin embargo, su actuación final, forzando una salida convulsa, ha cambiado su imagen. RDT ha pasado de ser el antihéroe preferido por los periquitos, el que provocaba una sonrisa cuando explicaba que prefiere a Mark Lenders antes que a Oliver Atom, a disfrazarse, viendo las redes sociales, de villano futbolístico.
En cualquier caso, la versión de Raúl de Tomás es la gran desconocida de esta historia. El futbolista sí se refirió a su futuro a principios del último verano, deslizando que un cambio de aires, por interés de ambas partes, era posible, aunque nada hacía pensar en que el capítulo final de su etapa fuera este.
En el plano personal, la decisión del jugador, de calidad incuestionable, ha sido compleja. El atacante sabe que no podrá ser inscrito con el Rayo hasta el mes de enero. Además, estar sin jugar de forma oficial supone, con casi toda probabilidad, anular sus opciones de estar en la convocatoria para el Mundial de Qatar.
Dos semanas más tarde, sin embargo, la operación se ha concretado. Sea como sea, pocos esperaban que, finalmente, el máximo goleador español de la temporada anterior, con 17 goles junto a Iago Aspas (Celta), fuera a ser traspasado por estas cantidades. Y de esta forma.