Sergio Ramos está en su peor momento deportivo. Las lesiones persiguen al ex capitán del Real Madrid y en París se ha pasado de la incertidumbre a las dudas claras por su fichaje. Con tan solo cuatro partidos de Liga –inédito en Champions- y otro en Copa, el rendimiento del sevillano ha hecho saltar las alarmas en el Parque de los Príncipes.
Leonardo, director deportivo del Paris Saint Germain, no se ha cortado esta última vez al hablar de Ramos: “Se le fichó y estaba bien físicamente. Pero ahora ha jugado solo cinco partidos. Desgraciadamente, no ha ido como pensábamos. Es duro para él y para todo el mundo”.
“Hay que esperar hasta el final de temporada para sacar conclusiones. No tengo miedo de asumir mis errores” ha puntualizado el directivo parisino.
Sus palabras dejan claro que el futuro de Sergio Ramos en París no está nada claro. El defensa se machaca para intentar llegar al partido de vuelta de Champions ante el Real Madrid en el Santiago Bernabéu de este miércoles pero aún está lejos de su nivel.
El camero tiene sobre la mesa dos caminos: apostar por una completa recuperación física en París y volver a intentarlo la próxima temporada o salir rumbo a una de las ofertas internaciones que le llegan.
Desde Estados Unidos su teléfono ya ha sonado varias veces, sobre todo desde el Inter Miami de su amigo y ex compañero David Beckham. Los Ángeles Galaxy es el otro equipo de la MLS que apuesta fuerte por Ramos.
Para el central sería la opción de firmar un último gran contrato y alejado del foco europeo intentar recuperar su mejor versión posible. Por primera vez Ramos se plantea su futuro con la incertidumbre que le dan las críticas internas que recibe en Francia.
El entrenador del París Saint-Germain, Mauricio Pochettino, admitió que las prolongadas ausencias del central español Sergio Ramos le están desconectando un poco del equipo por la sucesión de lesiones, aunque le envió un mensaje de apoyo y confianza.
"El rol de un jugador lesionado es difícil en un grupo. La dinámica se genera cuando uno está involucrado en los entrenamientos y puede competir con sus compañeros. Estando lesionado, sobre todo tanto tiempo, es difícil esa cohesión, esa capacidad de cohabitar con sus compañeros y tener un rol determinado", dijo el técnico.
El entrenador aseguró que "el que más sufre es el jugador" y que tiene "un gran equipo médico" que le ayuda en su recuperación, a lo que se suma "el apoyo moral, psicológico" del cuerpo técnico: "Queremos lo mejor para él, tratamos de ayudarlo de todas las formas posibles".