El Sevilla se juega el pase a la final ante el Manchester United. Los de Lopetegui han venido firmando grandes actuaciones a lo largo de la competición y se postulan como uno de los grandes favoritos. En frente, el mítico club inglés no dejará pasar la oportunidad de seguir alargando su historia por lo que el encuentro promete rivalidad.
Primeros minutos de tanteo de ambos equipos, presentando sus respetos por el rival. En una acción del United en el minuto 7 en el que percutía el área sevillista, Diego Carlos derribaba a Rashford y el árbitro decreta penalti. Bruno Fernandes marcaba el primer gol para su equipo en donde Bono esta vez no tendría ninguna opción a pararlo.
Los Red Devils ponía el listón alto en ataque y el Sevilla intentaba bajar el ritmo del partido con la posesión y poco a poco iban llegando las ocasiones para los andaluces. El conjunto inglés proponía un partido de ida y vuelta en donde los espacios en la zaga española les proporcionaba los huecos que necesitaban para sus atacantes.
Una jugada que comenzaba por la banda izquierda característica de Reguilón acababa en el lado derecho. Suso recogía el balón que le llegaba de su compañero y lo mandaba al fondo de la red de De Gea. El Sevilla conseguía igualar el marcador en el 26 de la primera parte.
La tensión era máxima y a medida que iba avanzando el encuentro los ánimos se caldeaban a través de alguna falta más dura de la cuenta. Se jugaban mucho y eso se reflejaba en el césped.
El United llegaba con mucho peligro a la portería de Bono y el Sevilla proponía más juego, la igualdad estaba en el marcador, pero los red llegaban con más incisión al área rival y la sensación de que eran algo superiores estaba ahí (1-1).
El Manchester comenzaba la segunda parte con un ritmo altísimo y poniendo en serios problemas a Bono, que saca varias ocasiones y evitaba que su equipo encajara gol. El hombre del encuentro hasta ese momento estaba siendo el portero sevillista y esto no era una buena noticia para el conjunto hispalense.
Lopetegui al ver el cariz que iba tomando el partido, comenzaba a pensar en cambios. El primero movimiento sería doble: Munir por Ocampos y De Jong por En-Nesyri.
No eran capaces de trenzar una jugada ni de mantener la posesión, por lo que estos nuevos jugadores entrarían para eso, para intentar que su equipo tuviera más el balón.
Ese primer vendaval del United era aplacado y a medida que pasaba los minutos la intensidad decaía y los hispalenses iban tomando el control de la situación.
La polémica llegaba con un posible penalti que el Sevilla pedía tras sacar una falta del lateral e impactar el esférico en el codo de uno de la barrera, ni el árbitro en primera instancia, ni el VAR en segunda lo pitarían.
Poco después, un centro milimétrico de Navas era rematado a boca jarro por De Jong y traspasaba la línea de cal de la portería. Los sevillista se ponía por delante del marcador en el minuto 78 (2-1).
Los cambios del entrenador español eran efectivo, no solo porque uno de las nuevas incorporaciones daba el gol, sino porque consiguió que su equipo se fuera haciendo con la posesión y acabar con las acciones en ataque de su adversario.
Nemanja Gudelj, el jugador que había sido positivo en coronavirus, tenía sus primeros minutos después de estar infectado y era ovacionado por todos sus compañeros.
El Sevilla jugará el viernes otra final de la Europa League. El sexto título para los hispalenses están más ceca. En frente tendrá al vencedor del partido entre el Inter y Shajtar Donetsk.