Dembélé responde en el campo: los números del francés que avalan la apuesta de Xavi Hernández por su continuidad

Ousmane Dembélé se ha convertido en uno de los jugadores que más aporta en el campo desde que se le levantara el castigo en el pasado mes de enero. El francés ha cambiado de parecer y ahora quiere quedarse. El club y el representante están en ello, mientras tanto el jugador responde en el campo.

Xavi Hernández decidió dejarle en el banquillo ante el Eintracht Frankfurt para dar paso a Adama Traoré. Al final el técnico culé le acabó metiendo en el partido para sobreponerse al gol de los locales nada más empezar el segundo tiempo.

El francés salió en el minuto 62 junto a Frankie De Jong y los dos cambiaron la cara de su equipo sobre el césped. En cuanto salió sus internadas por la banda derecha comenzaron a ser un verdadero problema para la defensa rival. Cada vez que la cogía encaraba para llegar a línea de fondo y crear ocasiones de peligro en el área. Tanto es así que tuvo participación en el gol que marcó Ferrán Torres y que dio el empate al Barça.

Los datos de Dembélé contra el Eintracht

Según han analizado los compañeros de Opta, Dembélé hizo un total de 26 pases bueno y solo falló tres. Además, generó dos ocasiones claras de gol. En poco más de media hora hizo 41 toques de balón por los 36 que hizo Adama con la mitad del tiempo.

El francés está plenamente implicado con el equipo y cada vez que Xavi le da la oportunidad rinde con el equipo. Es feliz y el gran momento del que goza el Barça está siendo determinante para que Ousmane haya decidido apostar por su continuidad en el club.

Habrá que ver si este deseo no llega demasiado tarde ya que las primeras impresiones de la reunión en Marruecos entre Moussa Sissoko y Mateu Alemany no fueron del todo buenas. El Barcelona no se mueve de los 8 millones por temporada que le ofrece y el representante quiere que al menos sean 10.

En la institución blaugrana tienen claro que se va a negociar bajo sus condiciones ya que la oportunidad pasó y fue en diciembre. O acepta lo que le ofrecen o no habrá nada que hacer. Es ahora el jugador el que tiene que decidir si está dispuesto a rebajarse su sueldo para continuar siendo feliz en el Barcelona.