Joaquín se enfrenta a uno de los mayores retos de su carrera como futbolista, la final de Copa del Rey que sólo podrá levantar un equipo: el Betis de sus amores o el Valencia, el rival de los verdiblancos donde también jugó 5 temporadas.
El capitán del Betis ha cambiado mucho físicamente a lo largo de los 14 años que ha militado en todas las categorías del club.
Joaquín debutó con el Real Betis en la Rosaleda frente al Málaga. Su equipo perdió el partido por 3-2, aunque esa noche no se le olvidará jamás al futbolista. Debutó con la camiseta del Betis en la máxima categoría, después de haber militado en todas las demás categorías con el club.
Con rostro de niño, y un cuerpo menos musculoso que en la actualidad a pesar de los años, fue titular ese partido pero tuvo que esperar dos semanas para que llegara su primer gol, frente al Espanyol con una victoria por 2-0.
Con los años, el futbolista ha cambiado por completo su pelo: se ha implantado y se lo ha teñido hasta de blanco. Su cuerpo ha ido evolucionando, hacia mejor, con una forma física impresionante para los 40 años que tiene. La exigencia física del fútbol es mayor en la actualidad que cuando debutó con 19 años, y él mismo lo sabe.
Lo que no ha cambiado es su sonrisa. Su faceta de cómico y su simpatía es algo que no borra la sonrisa de su cara, e incluso va a más con el paso de los años.
“Estoy casi tres kilos por debajo de mi peso ahora mismo. Estás con 39 años compitiendo al máximo nivel, que le doy gracias a Dios por la genética que tengo, porque no he sufrido lesiones importantes y eso me ha ayudado a alargar mi carrera, pero intento ser lo más profesional posible, entrenar cada día, cuidar mi alimentación, anteponiendo mi profesión a todo porque si no sería imposible. Por mucho que te ayude la genética, si no sumas todo lo demás, es muy difícil porque la edad te va mermando, la velocidad no es la misma, el físico te da para aguantar menos... Tienes que contrarrestarlo con otras cosas que es lo que me ayuda a alargar mi carrera", reconoció hace un año.
Pero el ejercicio no lo es todo y sabe que una buena alimentación favorece a que su cuerpo rinda al máximo: "Tenemos una dieta muy variada. El dietista nuestro en el día a día no nos prohíbe carne o gazpacho. Pero sí limita en cantidad. Te puedes tomar un gazpacho, pero no tres vasos. Más que nada porque la mujer no te da un beso en una semana, como te guste fuerte como a mí. Pero sí las cantidades, medir muy bien los días en que te puedes pasar un poquito".