El Atlético de Madrid empezará las eliminatorias de la Liga de Campeones jugando como local en el Estadio Nacional de Bucarest, donde hoy se medirá en la ida de octavos de final con el Chelsea, un rival que ha recuperado sensaciones desde la llegada al banquillo de Thomas Tuchel.
Simeone no se fía en absoluto del Chelsea y a marcado una hoja de ruta a su plantilla para frenar desde el primer minuto a los ingleses. Analizamos línea por línea al conjunto londinense.
Fiabilidad con Mendy. Uno de los fichajes que mejor le están saliendo al Chelsea es el del guardameta francés, encargado de enviar a la suplencia y de ponerle complicada la Eurocopa al español Kepa Arrizabalaga. Frank Lampard apostó por traer a este ágil y fiable portero procedente del Rennes con la temporada ya empezada y Tuchel ha mantenido su confianza en un Mendy, capaz de dejar este año la portería a cero en 15 encuentros entre Premier y Champions.
Línea de tres centrales y con la baja de Thiago Silva. Al igual que el Atlético, el Chelsea apuesta ahora por jugar con tres centrales, un esquema que Tuchel ya ha usado en sus anteriores equipos. La línea estará mermada por la ausencia de Thiago Silva, más por su experiencia que por un nivel que ha bajado en los últimos años. El navarro Azpilicueta y el alemán Rudiger parecen fijos, y de entre Christensen y Zouma, este peligroso a balón parado, saldrá el tercer componente de una zaga más asentada y que sólo ha encajado dos goles desde la llegada de su nuevo técnico.
Sin la dependencia de Kanté. Dentro del 3-4-3 de Tuchel no tiene cabida seguramente uno de los indiscutibles en el Chelsea desde hace muchos años. N'Golo Kanté ha perdido esa condición y con el alemán es ocupante habitual del banquillo.
En su lugar se mantiene Jorginho, un jugador que aporta también más trabajo que calidad, y el exmadridista Kovacic, que ya demostró en el Real Madrid e Inter su potencia para ser 'box to box' y romper líneas de presión. Por los costados, Tuchel tiene variedad y fuerza física, con Ben Chilwell, buen asistente, y Marcos Alonso como opciones por la izquierda, y el joven canterano Reece James por la derecha.
Mucho arsenal. Sin duda, uno de los puntos fuertes del Chelsea está en su frente ofensivo, la zona en la que más ha invertido en los últimos años y donde cuenta con mucho arsenal y variado, aunque aún no ha terminado de rendir como se esperaba. De entre todos, destaca el alemán Timo Werner, su gran apuesta para este año, pero que no está consiguiendo ver puerta con facilidad, aunque es muy peligroso por su movilidad.
A su lado, otro canterano como el joven Mason Mount, que aporta el talento de un '10', mientras que las tareas de '9' parece que recaerán sobre el veterano francés Olivier Giroud, autor de cinco goles en la fase de grupos de la Champions. Pero además, en el banquillo Tuchel tiene armas para cambiar el partido con la velocidad y habilidad de Christian Pulisic, Hakim Ziyech y Callum Hudson-Oddoi, el talento de Kai Havertz, o el gol que le puede dar Tammy Abraham.
La nueva hornada alemana. Thomas Tuchel, de 47 años, es otro de los buenos exponentes de la escuela de técnicos que está sacando Alemania junto a Juergen Klopp, Julian Nagelsmann o Marco Rose. Tras curtirse en la Bundesliga, dio el salto a un 'grande' como el Paris Saint-Germain al que fue capaz de llevar el año pasado hasta la final de la Champions, perdida ante el Bayern. Un obsesionado de la táctica que habrá preparado concienzudamente como hacer daño al Atlético.