El Atlético de Madrid ha consumado el naufragio en competiciones europeas no consiguiendo ni si quiera el pase para la Europa League. Los del Cholo Simeone cayeron por 2-1 ante el Oporto, lo que sumado al empate entre el Leverkusen y Brujas deja a los rojiblancos apeados.
El conjunto colchonero perdió por la mínima pero el resultado puso ser mucho más abultado si no llega a ser por Oblak, que sostuvo al equipo durante todo el equipo. Griezmann marcó en el tiempo añadido pero ya no iba a valer nada más que para maquillar el resultado.
No hay presente ni futuro en Europa para el Atlético de Madrid, ni en la Liga de Campeones ni en la Liga Europa, a la que fue incapaz también de agarrarse en el despropósito más visible del conjunto rojiblanco en la era Diego Simeone, no sólo por la derrota en Oporto, donde hizo el ridículo en el primer tiempo, sentenciado con dos goles en contra, sino por todo su recorrido en esta edición del torneo, que lo sobrepasa y lo reprime con total severidad (2-1).
Fue precisamente el francés quien dio la cara tras el partido: "No nos merecemos ni pasar a octavos, ni a Europa League ni nada. Ahora toca cerrar la boca, apretar el culo y trabajar. Dar gracias a la afición por el trabajo que hacen, no se merecen esto".
Griezmann ratificó la confianza de la plantilla en Simeone pese al batacazo: "Estamos aquí a las órdenes del Cholo, confiamos plenamente en él. Ahora toca seguir trabajando".
Porque nada escondía el fiasco de la Liga de Campeones. Ni siquiera la Liga Europa. Pero, al menos, amortiguaba una caída estrepitosa. En 2017-18 fue un salvavidas para el Atlético, campeón de aquel torneo en Lyon contra el Marsella. También el billete para la Supercopa de Europa que ganó al Real Madrid en Tallin en 2018.
Cuando levantó esos dos títulos, el sexto y séptimo de la era Simeone (el octavo y último hasta ahora fue la Liga de 2020-21), nadie echó la vista atrás para acordarse de la forma en que había llegado a tales instancias e instantes. Ni siquiera eso tiene ahora. Ha ganado sólo cuatro de sus últimos 16 duelos de Champions. Es su realidad. "Y contra la realidad no podemos ir", decía el técnico en la víspera.