Pedri ha vuelto al trabajo con el FC Barcelona y se ha hecho las correspondientes pruebas médicas del inicio de pretemporada. El cambio físico del jugador canario, respecto al 2020, es más que evidente y ha llamado mucho la atención de los aficionados.
El centrocampista culé se lesionó en abril en un partido de Europa League frente al Eintracht de Frankfurt. El futbolista sufrió una rotura del bíceps femoral de la pierna izquierda.
Pedri se puso manos a la obra durante su recuperación, en la que, no solo trabajó para volver cuanto antes a los terrenos de juego, sino también para hacerlo en el mejor estado de forma posible.
Han sido tres meses y medio de trabajo duro en los que había un objetivo que iba más allá de recuperarse de la lesión: quería ganar volumen y peso. Y, a juzgar por las imágenes, no hay duda de que lo ha conseguido y, se calcula, que el jugador canario ha ganado cuatro kilos.
Para conseguirlo, ha contado con la ayuda de su preparador personal, junto con la de los preparadores físicos de club azulgrana. Además, ha instalado en casa equipamientos de TRX, poleas y balones medicinales, por lo que, el trabajo nunca para.