Luka Doncic pasó por encima de los New Orleans Pelicans y los Dallas Mavericks cosecharon una abultada victoria gracias a una espléndida exhibición en ataque de la estrella eslovena (107-139). Doncic pulverizó la defensa de los Pelicans y logró 28 puntos (11 de 16 en tiros), 4 rebotes y 14 asistencias en solo 27 minutos sobre la pista, algo que no hacía nadie desde Magic Johnson en 1987.
Este es el doble-doble número 100 para Doncic en la NBA. El base, cuyo único pero fueron los 8 balones que perdió, comenzó el partido como un ciclón (18 puntos en el primer cuarto) y vio el último parcial desde el banquillo, ya que para entonces los Mavericks tenían asegurado el triunfo.
Los de Dallas terminaron el encuentro con un impresionante 68,7 % de acierto en tiros de campo (57 de 83) que supone un nuevo récord en la historia de la franquicia de Texas. Kristaps Porzingis (20 puntos y 10 rebotes), Jalen Brunson (17 puntos) y Tim Hardaway Jr. (16 puntos) fueron los acompañantes ideales para Doncic. Los Mavericks supieron así reponerse de la dura derrota en casa que sufrieron ante los Cleveland Cavaliers (96-114) de Ricky Rubio.
Por el contrario, Los Pelicans venían de asaltar la cancha de Los Angeles Clippers (104-123) con una memorable actuación de Jonas Valanciunas (39 puntos y 7 triples), pero hoy ofrecieron una imagen muy pobre -especialmente en defensa- y nunca plantaron cara realmente a los Mavericks.
Brandon Ingram, con 29 puntos, fue el único que rindió a buen nivel en los Pelicans ya que Jonas Valanciunas se quedó en unos flojos 6 puntos (1 de 8 en tiros, 0 de 4 en triples).
El pívot español Willy Hernangomez jugó 12 minutos saliendo desde el banquillo y sumó 4 puntos (2 de 4 en tiros), 5 rebotes y 2 asistencias para los Pelicans.
El primer cuarto solo tuvo un amo y señor: Luka Doncic. El referente de los Mavericks dio una clase magistral en ataque -jugando en el poste, repartiendo juego o ametrallando desde el triple- y acabó el primer cuarto con unos números superlativos de 18 puntos (7 de 8 en tiros), 6 asistencias y 2 rebotes.
Los Mavericks se apuntaron a la fiesta que propuso Doncic y dominaron con claridad a unos Pelicans en los que solo Brandon Ingram, con 11 puntos, propuso algo de resistencia (23-41). Ante un Doncic tan inspirado, los Pelicans tenían que aprovechar cada segundo del base rival en el banquillo.
Al descanso (46-67), los Mavericks habían conseguido un impresionante 70 % de tiros de campo y Doncic ya había logrado un doble-doble de 22 puntos (9 de 11 en tiros) y 10 asistencias.
Los Pelicans debían apretar en defensa si querían aspirar a una remontada heroica, pero los locales estaban muy lejos de igualar en la intensidad y entrega a los visitantes (53-75 con 8.13 por jugarse). Todo eran sonrisas para los Mavericks: Porzingis metía un triple, Powell se lucía con un mate y Doncic lograba penetraciones sin oposición (68-91 a falta de 2.28).
El tercer parcial concluyó sin que nada cambiara en el ritmo del partido y confirmó que la defensa de los Pelicans era esta noche un desastre sin remedio (75-102). Con el resultado decidido, ambos equipos reservaron a sus titulares en un último cuarto sin historia. Los Pelicans tendrán esta misma semana la opción de vengarse puesto que el viernes se enfrentarán de nuevo a los Mavericks, esta vez en la cancha de los de Dallas.