Madrid ha amanecido el sábado con diez de sus municipios cerrados. Son regiones que cumplen los criterios para ser confinadas, pero no son las únicas. En Castilla y León, por ejemplo, capitales de provincia como Valladolid o León rozan peligrosamente el umbral, aunque ninguna de ellas cumple aún los criterios estipulados por Sanidad (una incidencia acumulada de 500 casos por cada 100 000 habitantes durante 14 días, una positividad superior al 10 por ciento y una ocupación de camas de UCI por encima del 35 por ciento en el municipio al que pertenece).
Aun así, el alcalde de Valladolid ha pedido ya a los ciudadanos que salgan de casa lo imprescindible para evitar un confinamiento como el de Madrid. Es junto con León, la capital de provincia que más se acerca a los criterios estipulados por Sanidad. Ambas superan el 35 por ciento de la ocupación de camas de UCI, la positividad por PCR está por encima del 10 por ciento, pero les salva que los casos están algo por debajo de los 500 por cada 100 000 habitantes.
En total, en Castilla y León hay seis municipios confinados. Esta semana se sumaban tres, entre ellos, Medina del Campo. Además, la Junta ha prorrogado una semana más el confinamiento de Íscar y Pedrajas de San Esteban.
Además, la presión hospitalaria ha aumentado vertiginosamente. En un mes se ha triplicado la ocupación de camas en planta y UCI de la comunidad.