Han pasado 8 meses solamente desde que la OMS declaraba la pandemia y ya tenemos alguna vacuna autorizada, como en Reino Unido o Rusia, y otras lo harán muy pronto en días en el conjunto de la Unión Europea. Desde luego, es todo un récord, es un hito, pero eso hace también que haya bastante gente que todavía tenga cierto recelo a vacunarse, por lo menos los primeros.
El coronavirus, el que causa la enfermedad covid19, ha protagonizado 2020. No obstante, en menos de un año, varias vacunas están preparándose ya para salir, un hecho histórico para la ciencia, según apuntan los expertos. "Los recursos económicos y humanos que se han puesto para conseguir una vacuna nunca se han visto", señala Mercedes Jiménez, investigadora del CIB-CSIC.
Otra clave ha sido que para las agencias reguladoras esta vacuna Además, la mayoría de proyectos de vacuna no partían de cero, sino de investigaciones anteriores ya ensayadas. La propia emergencia sanitaria ha permitido también superponer algunas fases de pruebas.
"La fase I no había terminado y ya se estaba empezando la fase II. Pero todas las fases se han respetado escrupulosamente. Si te salta algo mal, suspendes el proceso, como pasó con dos vacunas", comenta al respecto Amós García Rojas, presidente de la Asociación Española de Vacunología.
"Toda vacuna y todo desarrollo ha sido rigurosamente aprobado en cada una de las fases", añade Mercedes Jiménez. Esos resultados también pueden ser consultados en revistas científicas aunque se publiquen más tarde.
En cada investigación de una vacuna, hay una fase preclínica, con células en laboratorio. Después se ensaña con ratones, y posteriormente con primates. A estos últimos incluso se les llega a inocular el virus para comprobar la eficacia de la vacuna, algo que no se hará en humanos.
Solo si los resultados son seguros, y la agencia reguladora lo aprueba, se pasará a los ensayos con humanos, en tres fases. Primero, con menos sujetos, y ya en una tercera fase, con miles de personas, usando placebo y vacuna.
Así Moderna, por ejemplo, afirma que su vacuna tiene un 94% de eficacia y un 100% en casos graves. Esta conclusión conclusión se obtuvo después de hacer un ensayo con 30.000 personas, en un entorno de alta incidencia de covid. A la mitad se les administró la vacuna, y al cabo de unas semanas, 196 se habían infectado, de las cuáles, 185 no estaban vacunadas.
De ahí obtienen el porcentaje de eficacia, pero además, ninguno de los vacunados resultó ser un caso grave. Por ello destacan un 100% de eficacia en casos graves. "Son resultados preliminares. Cuando se aumenta la muestra, la efectividad puede variar", concluye Giménez. Pero, además, hay que analizar todas las conclusiones y pasos del proceso, también que se garantice que la vacuna impide la transmisión del virus.