El tifón Lekima deja ya al menos 32 muertos a su paso por China y hay además al menos 16 desaparecidos y cerca de un millón de personas han tenido que ser evacuadas.
La mayoría de las víctimas mortales han sido causadas por un deslizamiento de tierra registrado en el condado de Yongjia que ha provocado la rotura de una presa natural.
Lekima tocó tierra anoche con vientos de hasta 187 kilómetros por hora provocando un caos absoluto en el transporte y al menos 3 millones de hogares siguen sin luz. Las autoridades estiman que más de 600 vuelos y decenas de trenes han sido cancelados. Además el tifón ha dañado más de 173.000 hectáreas de cultivo y 34.000 hogares en Zhejiang.
La agencia meteorológica china emitió el sábado una alerta naranja por los posibles efectos del tifón, que ha perdido fuerza en las últimas horas pero amenaza con seguir dejando fuertes lluvias y vientos en ciudades como Shanghái.