En Murillo el Fruto, un pequeño pueblo de Navarra, este fin de semana han tomado posesión de su cargo los dos primeros concejales de un partido cannábico en toda Europa. Andrés y Germán, los miembros de este partido, han jurado hoy su cargo. Su apuesta no es por la marihuana, sino por el cáñamo industrial, la variedad de la planta que no tiene apenas componente psicotrópico, que no coloca.
Es un cultivo con mucho potencial, en plena expansión en toda Europa, que en España se ve afectado por una falta de regulación. El lío normativo hace que los agricultores puedan ser procesados por narcotráfico a pesar de cumplir con todos los permisos.
El Partido Cannábico-Luz Verde conseguía dos concejales en las elecciones municipales al ayuntamiento navarro de Murillo el Fruto. Esta formación se presentaba sólo en tres municipios de España, en concreto, en Madrid, Barcelona y Murillo el Fruto.
En la localidad navarra, de poco más de 600 habitantes, el Partido Cannábico-Luz Verde conseguía dos de los siete concejales en juego, mientras que la victoria era para Adelante Murillo, con cinco ediles.