La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha sido la protagonista de la semana. En lo personal por los insultos de Vox en el Congreso y en lo político por los efectos de su ley del ‘sí es sí’. La Audiencia Provincial de Alicante se suma a las siete que ya han anunciado que de momento seguirán rebajando penas a agresores sexuales cuando les beneficie la nueva ley. Mientras, el viernes, en una de las marchas de Madrid contra la violencia de género se veía una pancarta pidiendo su dimisión. El sábado, Podemos ha celebrado un acto en la capital para apoyarla, pero Montero no se ha referido a las peticiones de dimisión.
“Irene Montero no ha atendido a la prensa, así que no le hemos podido preguntar sobre esas peticiones de dimisión que se escucharon ayer en algunas manifestaciones feministas”, ha informado Marta Núñez para ‘Cuatro al día’, añadiendo que “la ministra de Igualdad ha encontrado un público totalmente entregado, en el que estaba, por cierto, Pablo Iglesias, que ha escuchado durante cerca de hora y media mensajes de apoyo a la ministra de Igualdad”.
Por su parte, “la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, ha asegurado que Montero es un baluarte del feminismo internacional y por eso está sufriendo la peor cacería de la historia de Podemos”.
Asimismo, ha explicado que “la propia Montero ha dicho que la violencia política es una estrategia del machismo para frenar los avances de las mujeres y ha vuelto a defender la ley del ‘solo sí es sí’. Dice que es una ley sólida y lo único que hace falta es aplicarla correctamente”.
En palabras de Irene Montero, “la violencia política es la estrategia que utilizan los reaccionarios, el machismo, para tratar de frenar los avances en derechos que el movimiento feminista está asentando en nuestra cultura, nuestra sociedad y, también, por suerte en nuestras leyes”.