Las autoridades de Ucrania han cifrado este sábado en 353 el número de niños muertos desde el inicio de la invasión rusa, desatada el 24 de febrero por orden del presidente de Rusia, Vladimir Putin, al tiempo que han subrayado que más de 660 menores han resultado heridos en el marco de las hostilidades.
La Fiscalía ucraniana ha dicho a través de un mensaje en Telegram que ha podido verificar 353 niños muertos y 662 heridos, si bien ha resaltado que "estas cifras no son finales, ya que el trabajo está en marcha en lugares de hostilidades activas y en los territorios temporalmente ocupados y liberados".
Tanto el Kremlin como el Estado Mayor de Ucrania han confirmado que las tropas rusas están intensificando sus ataques en el este y el sur del país una vez terminada la fase de reagrupación de tropas.
En el sur del país al menos tres personas han muerto y 15 han resultado heridas en la ciudad ucraniana de Dnipró, después de que un ataque ruso con misiles haya golpeado una fábrica, según han informado las autoridades locales.
"Los cohetes han alcanzado una empresa industrial y la concurrida calle de al lado. El ataque ruso se cobrado la vida de tres personas y otras 15 han resultado heridas", ha detallado el gobernador militar de la provincia de Dnipropetrovsk, Valentin Reznichenko, en su canal de Telegram.
De entre las 15 personas heridas, dos registraban heridas de gravedad media, mientras las otras 13 presentaban heridas de calado grave. Producto del impacto de los misiles, dos coches de los alrededores se han quemado, mientras otros diez han resultado dañados
Asimismo, otras dos personas han muerto en Nikopol, según Reznichenko, tras denunciar el lanzamiento de 53 cohetes Grad contra la ciudad.
Por último, las autoridades ucranianas han elevado a 24 el número de fallecidos en el ataque de las fuerzas rusas de esta semana contra la ciudad ucraniana de Vínitsia, situada en el centro del país, ha denunciado Serhi Borzov, jefe de la Administración Militar Regional de Vinnytsia, en su canal de Telegram.