La música de 'Sexo en Nueva York' suena cuando Miquel Iceta sube al escenario. Acaba de ser reelegido como secretario general de los socialistas catalanes, y lo celebra bailando y lanzando un mensaje de perseverancia. "Cuando las personas tropiezan y se caen, vuelven a levantarse y no se rinden", señala Iceta.
Ni una mención a las tensiones de los últimos días dentro de su partido. Es la vicepresidenta en funciones, Carmen Calvo, la que defiende el debate. "No hay un partido como el PSC y el PSOE que debatan de abajo arriba", señala.
El problema está en las negociaciones con los independentistas catalanes, que piden una mesa de diálogo de gobierno a gobierno. Cuando le preguntaron este viernes a Sánchez sobre esa exigencia, contestó con una fórmula difusa. "El marco tiene que ser la seguridad jurídica que emana de las leyes democráticas que tenemos", comenta Sánchez.
Cuando le preguntaron a Iceta, el líder socialista catalán se mostró de acuerdo con el diálogo de gobierno a gobierno. "Una mesa de negociación y si Esquerra la quiere entre gobiernos, entre gobiernos", explica Iceta. Eso hizo enfadar a barones de su propio partido. García Page le hizo esta advertencia. "Sobre toda España hablamos todos los españoles y todo el PSOE", comentó García Page. Y Lambán le llamó supremacista
Sánchez tiene que lidiar con esas fuertes tensiones internas en su largo camino hacia la investidura. Él PSOE mantiene la ilusión de que sea este año. Pero los independentistas apuntan al que viene, en enero. Eso significaría varias semanas más de tensiones en el partido socialista.