Después de una semana llena de negociaciones a contrarreloj –desde que Pablo Casado y los partidos catalanistas se mostraron en contra de mantener el mando único – el Congreso ha votado con mayoría absoluta (178 votos a favor) la prórroga del estado de alarma, al menos, otros 15 días; es decir, hasta el próximo 23 de mayo (incluido).
En su comparecencia, Sánchez instaba a los partidos parlamentarios a prolongar la excepcionalidad del estado de alarma “unas semanas más”, sin definir exactamente el número de semanas necesarias para terminar de controlar la expansión de un virus que ha matado ya a más de 25.000 personas en España.
Con este sí de la cámara se mantendrán tres de las normativas vinculadas al mando único que el Gobierno considera fundamentales para frenar la crisis sanitaria del COVID-19: la obligación del confinamiento de los ciudadanos siempre que sea necesario, la regulación los ERTES y la prohibición de las manifestaciones y/o concentraciones masivas de gente en las calles.
Aunque hoy se haya conseguido la mayoría absoluta, Pablo Casado le ha advertido al Presidente del Gobierno que será la última vez que apoye una prórroga, pues en la próxima “el PP votará en contra”. Lo que la oposición quiere es que el Ejecutivo active otras vías para finiquitar la crisis del COVID-19, a través de leyes sanitarias individuales y de la creación de unos nuevos ERTES que deban ser consensuados en el Congreso de los Diputados y con cada una de las Comunidades Autónomas.